Derrotada la izquierda en elecciones bolivianas
Bolivia cambiará de rumbo tras 20 años de socialismo: balotaje entre dos candidatos de derecha Bolivia vive un giro histórico en su vida política
Bolivia cambiará de rumbo tras 20 años de socialismo: balotaje entre dos candidatos de derecha Bolivia vive un giro histórico en su vida política. Tras casi dos décadas bajo gobiernos del Movimiento al Socialismo (MAS), el país se encamina hacia un cambio de rumbo, luego de que los resultados preliminares de las elecciones generales confirmaran que los dos candidatos más votados son opositores de derecha. El senador Rodrigo Paz Pereira, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), y el expresidente Jorge ‘Tuto’ Quiroga, de la alianza Libre, se enfrentarán en la primera segunda vuelta presidencial de la historia boliviana. Con el 92,4% de las actas computadas, Paz Pereira lidera con el 32,2% de los votos, seguido por Quiroga con el 27%. En contraste, el MAS sufrió una derrota estrepitosa: su candidato, Eduardo del Castillo, apenas alcanzó 3,1% de apoyo, mientras que Andrónico Rodríguez, presidente del Senado, se quedó en 8,2%. La implosión interna del oficialismo, sumada a la crisis económica y a la disputa entre Evo Morales y Luis Arce por el control del partido, terminó por sepultar a la izquierda en los comicios. Rodrigo Paz, economista de 57 años e hijo del expresidente Jaime Paz Zamora, fue la gran sorpresa electoral. Nacido en España durante el exilio de sus padres, pasó de figurar en los últimos lugares de las encuestas a imponerse en la primera vuelta. Se ha presentado como un candidato dialogante que promete descentralizar recursos y acabar con la corrupción. Por su parte, Quiroga, quien ya gobernó entre 2001 y 2002, plantea un giro liberal en la economía, con recortes de impuestos y eliminación de subsidios. Ambos comparten la idea de romper con el modelo estatista que caracterizó al MAS, aunque especialistas advierten que la transición no será sencilla: la población se acostumbró a programas asistenciales que difícilmente podrán desmontarse. El balotaje, previsto para octubre, marcará el fin definitivo de la hegemonía del MAS y abrirá una nueva etapa en Bolivia, esta vez bajo el liderazgo de la derecha.