El equipo de Diego Aguirre remontó un 0-2 gracias a un inspirado Matías Arezo, pero no pudo sumar de a tres frente a Miramar Misiones en el Silvestre Octavio Landoni de Durazno.
Enviado a Durazno Todavía no iban 2' de juego y más allá de que la frase "la gente todavía no se había acomodado en sus asientos" no corre porque las tribunas del Silvestre Octavio Landoni se llenaron minutos antes de las 17:30 -media hora antes del partido-, los hinchas de Peñarolsufrieron el primer golpe de la tarde apenas comenzado el encuentro.
Es que de una pelota que Ignacio Sosa mandó al lateral por la derecha del ataque de Miramar Misiones vino el primer gol en Durazno. El Cebrita hizo el saque de banda, movió de manera poco ortodoxa el balón de derecha a izquierda y le quedó a Pablo López, quien se fue de la marca de Javier Méndez ya sin Pedro Milans en la escena, envió un centro que conectó Dennis Olivera con el pie para mandarla a guardar: 1-0.
Estupor a orillas del Río Yi. El "local" estaba dando el batacazo ante un equipo de Diego Aguirre que salió dormido y que al recibir ese sorpresivo tanto, algo despertó, pero no lo suficiente porque generó alguna jugada de peligro, aunque sin profundidad.
https://www.youtube.com/watch?v=L1-Ct1603is Y como por si eso fuera poco, Miramar, que se defendió muy bien pero luego del gol no atacó más, encontró un penal que llegó en el cierre de la primera parte por una mano de Milans y luego de la revisión en el VAR, Sebastián Da Silva la mandó a guardar y los de Bernardo Giordano se fueron al descanso 2-0.
Aguirre movió el banco en el entretiempo y mandó a la cancha a Lucas Hernández por Javier Méndez, a Matías Arezo por Ignacio Sosa y a Tito Villalba por Jaime Báez. El equipo salió con otro ímpetu y al menos no tomó un gol en los primeros 2'. Tampoco lo anotó.
Pero de a poco, la figura de Arezo empezó a crecer en paralelo a la de Juan Moreno. El colombiano se atajó todo. Solo no pudo a los 56' con un balazo del delantero aurinegro y a los 78'.
De todas maneras, Moreno no fue la única explicación al resultado. Peñarol jugó mal, sin ideas, escasas triangulaciones y sin sorpresa alguna por las bandas. Y eso le costó caro.
Matías Arezo salvó a un equipo que no encuentra el rumbo futbolístico tras la lesión del Cangrejo Cabrera y que volvió a regalar un primer tiempo, aunque esta vez a un muy alto costo ya que dejó dos puntos por el camino y a pesar de que seguirá siendo líder del Torneo Clausura, Nacional puede quedar a tres unidades en este certamen y además, sacarle seis en la Tabla Anual. Complicado.
La Fiera deberá seguir moviendo piezas para encontrar el funcionamiento que perdió y ahora, el tiempo apremia.