Néiser, el goleador que estará ausente
José Orlando Ascencio - Subeditor de deportes @josasc
Fue el goleador del Suramericano Sub-20 y es hoy el máximo artillero del Mundial, junto al estadounidense Benjamín Cremaschi
José Orlando Ascencio - Subeditor de deportes @josasc
Fue el goleador del Suramericano Sub-20 y es hoy el máximo artillero del Mundial, junto al estadounidense Benjamín Cremaschi. Colombia, seguramente, sentirá mucho su ausencia el miércoles, cuando salga a buscar el paso a la primera final histórica de un equipo masculino del país en un torneo Fifa. Néiser Villarreal vuelve a tener encima todos los reflectores, gracias a su talento como futbolista. Marcó tripleta contra España para meter a Colombia entre los cuatro mejores de la Copa del Mundo y reaccionó con lágrimas. En medio de sus dos momentos de gloria vestido de amarillo, azul y rojo, vivió momentos muy difíciles en su club, Millonarios, con el que no ha jugado este semestre, en parte por su culpa, en parte por una lesión. "Venimos mucho tiempo juntos y ahora estamos muy agrupados como equipo. Todo es gracias a Dios que siempre me guía. Estoy muy contento con el grupo y la clasificación. Hablamos de ir por siete finales y ya vamos cinco. Ahora toca descansar y pensar en el próximo partido, pero estoy contento", declaró el atacante tras su gloriosa tarde de sábado en Talca. Ya había llorado el día del doblete contra Sudáfrica, cuando contó una historia que pocos conocían: su padre fue asesinado cuando tenía 6 años. "Recuerdo un poco y siempre en las noches que me ayuda desde arriba... Desde la primera ocasión siempre dije que me iba a ayudar, siempre le digo a él cuando tengo partidos, porque a él le gustaría que yo estuviera acá en la Selección", contó ese día. Si alguien ha confiado en el tumaqueño es su técnico en la Selección Sub-20, César Torres. Le costó llegar, primero, al fútbol profesional: lo rechazaron en Boca Juniors de Cali y en Ecuador. Otro club del Valle, Águilas Distrital, le dio la confianza y allí lo vio Édgar Moreno, quien lo llevó a Millonarios, donde solo jugó puñados de minutos antes del Suramericano. Y luego, cuando vino el conflicto con el club, el DT le tendió la mano. Ney (con Y griega a pedido del jugador, a pesar de lo que marcan sus documentos, en homenaje al brasileño Neymar, su ídolo), vivió meses difíciles a su regreso de Venezuela. Entró en conflicto con Millos por su contrato y se irá libre en noviembre. Y además, hubo dos episodios que pudieron dejarlo afuera del Mundial: una lesión de rodilla y una aparición en un video de TikTok con la camiseta del América, que le valió no pocos insultos de los hinchas azules. Lo que no se sabía es que llamó a Torres y le dijo que no merecía ir a la Copa del Mundo. El técnico tuvo que manejar con tacto la situación. "Cuando sucedió lo de la camiseta de América, me escribió llorando y me dijo que no merecía ir a la Selección, que no quería venir, estaba muy frustrado. Lo llamé varias veces y le dije que él era el goleador de la Selección, un derecho que nadie se lo puede quitar, y que se recuperara", dijo el DT. La lesión ocurrió el 27 de julio, cuando la Sub-20 jugó contra Panamá en el Pascual Guerrero. Esguince grado 2 en el ligamento colateral medial de la rodilla izquierda. Se necesitaban de seis a ocho semanas para conseguir el alta médica. Torres manejó el asunto con toda la paciencia del caso. Incluso, la última parte de la recuperación la hizo ya como parte de la Selección. De hecho, no fue titular en el primer partido, contra Arabia Saudí. Entró en la segunda etapa. Son muchas emociones. Se fue en blanco en la fase de grupos, pero luego, en los mata-mata, ha sido clave. Por eso las lágrimas, que no son solo de alegría, sino de desahogo. El miércoles, el goleador de la Sub-20 de Colombia sufrirá desde afuera.