¿Los resultados de los análisis son más fieles si se hacen antes o después de desayunar?
La ventaja más clara que parece tener la medición de lípidos sin ayuno es que simplifica la toma de las muestras para los pacientes, laboratorios y médicos
¿A quién no le ha pasado? Tener que cenar casi a la hora de la merienda, evitar salidas nocturnas o hacer malabarismos entre el reloj y el apetito para guardar las 12 horas de ayuno que se piden para el frecuente "perfil lipídico" , que registra los triglicéridos y las distintas fracciones del colesterol
La ventaja más clara que parece tener la medición de lípidos sin ayuno es que simplifica la toma de las muestras para los pacientes, laboratorios y médicos
¿A quién no le ha pasado? Tener que cenar casi a la hora de la merienda, evitar salidas nocturnas o hacer malabarismos entre el reloj y el apetito para guardar las 12 horas de ayuno que se piden para el frecuente "perfil lipídico" , que registra los triglicéridos y las distintas fracciones del colesterol.
Sin embargo, esta exigencia ya no es necesaria . Y este requisito no se cumple en muchos países del mundo, aunque no aún masivamente entre nosotros. Es más: las numerosas investigaciones que se han replicado desde hace más de 15 años —cuando se conoció la primera— hasta hoy muestran que para medir el riesgo cardiovascular los resultados sin 12 horas de ayuno son en realidad menos fieles que los obtenidos entre quienes sí desayunaron .
"Dentro del perfil lipídico se analizan los valores de un tipo de lipoproteínas llamadas remanentes, que son ricas en triglicéridos y que están en circulación un promedio de 6 horas, con un pico entre las 2 y las 4 horas —explica Gabriela Berg, doctora en farmacia y bioquímica, investigadora principal del Conicet y profesora en el Laboratorio de Lípidos y Aterosclerosis de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires (UBA)—. Estas lipoproteínas también transportan colesterol . Además, como el llamado DL, atraviesan el endotelio y son parte de la placa aterosclerótica. Si el análisis se hace con 12 horas de ayuno es muy probable que no se las detecte correctamente ".
Berg, que es directora del Programa de Control de Enfermedades Cardiovasculares (Procordis) de la Fundación Bioquímica Argentina (FBA), añade que en 2009 una investigación realizada en Dinamarca, el Estudio Copenhague mostró que el ayuno no era necesario para establecer el perfil lipídico de los pacientes y su riesgo cardiovascular. A una conclusión similar había llegado el llamado Estudio de las Mujeres de los Estados Unidos y se comenzaron a cambiar las condiciones preanalíticas, es decir, lo que se debe hacer —o no hacer— antes de un análisis clínico.
"La mayoría de las personas consumen varias comidas durante el día, e incluso algunos consumen colaciones entre comidas; por lo tanto, el estado posprandial predomina durante las 24 horas del día. No obstante, en la práctica clínica, el perfil lipídico se mide convencionalmente en el plasma o suero obtenido después de un ayuno de al menos 8 horas y, por tanto, puede no estar reflejando las concentraciones plasmáticas medias diarias de lípidos y lipoproteínas y el consecuente riesgo asociado de enfermedad cardiovascular", afirma el autor principal del estudio Copenhague, el danés Børge G. Nordestgaard.
Comer o no comer
" El estudio Copenhague demostró que en el único caso en que deberían solicitarse 8 horas de ayuno para perfil lipídico es cuando el paciente tiene más de 440 mg/de triglicéridos , que es una cifra muy alta —afirma la doctora María Eugenia Almagro, directora técnica de LabMedicina/Diagnóstico Maipú—. Las personas no deberían dudar cuando se les solicita análisis con un ayuno de solamente 2 horas, que es la recomendación que hacemos en nuestros laboratorios. Es una práctica que ya sido aceptada en más de 36 países del mundo, incluido Brasil. Pero aquí, entre nosotros, aún operan resistencias tanto de parte de los médicos como de los pacientes ". La gran mayoría de los análisis que solicitan los médicos no presentan diferencias significativas con y sin ayuno
" La evidencia científica no habla de dos horas de ayuno, sino de ‘sin ayuno’ —puntualiza Gabriela Berg—. Si bien las investigaciones muestran que la mayoría de las determinaciones no experimentan variaciones importantes de acuerdo a si se ayunó o no, algunos indicadores sí demandan 8 horas de ayuno. Entre nosotros, por ejemplo, el diagnóstico inicial de diabetes se confirma con una glucemia en ayunas de 8 horas . Pero en otros países ese mismo diagnóstico se realiza mediante la determinación de la hemoglobina glicada (HbA1c), que no requiere ayuno y refleja el control glucémico a largo plazo. Sin embargo, en nuestra región el diagnóstico continúa basándose principalmente en la medición de glucemia, dado que la determinación de HbA1c implica un costo más elevado y menor disponibilidad para muchos sectores".
Pero las personas con diabetes que ya conocen su problema pueden realizar controles periódicos sin necesidad de ayunar y esto evita el riesgo de hipoglucemia, una complicación frecuente en la enfermedad, asociada a menudo a lapsos prolongados sin comer o beber. Existen algunas otras pruebas para analizar el metabolismo de los hidratos de carbono, como la insulina y el glucagón, que pueden verse afectados si no se realiza un análisis con ayuno de al menos 8 horas, por eso en estos casos sí se debe ayunar. "Pero la gran mayoría de los análisis que solicitan los médicos no presentan diferencias significativas con y sin ayuno ", recalca Berg.
" Desde 2021 hemos implementado la posibilidad de hacer análisis clínicos con 2 horas de ayuno —explica el bioquímico Alexis Muryan, jefe del Servicio de Laboratorio del hospital Británico—. Existen numerosos estudios bien diseñados y con seguimiento a largo plazo que demostraron en forma consistente que los resultados de los análisis de laboratorio con y sin ayuno no difieren significativamente. En la Argentina ya en 2016 la guía práctica de la Sociedad Argentina de Lípidos sugiere la realización del perfil de lípidos sin ayuno previo porque refleja mejor el verdadero estado metabólico. Los efectos del estado posprandial sobre el perfil lipídico mejoran la robustez de las asociaciones entre las concentraciones plasmáticas del colesterol, triglicéridos y lipoproteínas y el riesgo cardiovascular".
María Eugenia Almagro, por su parte, puntualiza que Labmedicina participó de un estudio realizado en el país entre 12 laboratorios de distintas provincias , coordinado por la Asociación de Laboratorios de Alta Complejidad (ALAC) que demostró que no existieron diferencias en los dosajes de lípidos de quienes habían desayunado y quiénes no. "Dividimos a los que desayunaban en dos grupos —indicó la especialista—. Un grupo tenía enfermedad cardiovascular previa y debía desayunar café con leche y 2 medialunas; el otro grupo, sin alteraciones metabólicas, tenía la posibilidad de desayunar libremente. La conclusión es que no hubo diferencias ".
El plan de Labmedicina, agrega Almagro, es continuar con esta investigación para lograr la participación de más centros de alta complejidad y así extender la evidencia de que no es necesario guardar un ayuno superior al de 2 horas también en nuestro medio. "El objetivo es capacitar a extraccionistas y técnicos y también difundir esta opción entre el cuerpo médico de distintas especialidades —asegura la directora técnica—. La ventaja más clara que parece tener la medición de lípidos sin ayuno es que simplifica la toma de las muestras para los pacientes, laboratorios y médicos . Los laboratorios suelen estar atestados de pacientes en horas de la mañana y esto sobrecarga de trabajo a los empleados sin una necesidad real que lo justifique".
Dice Gabriela Berg, por otra parte, que desde la Fundación Bioquímica Argentina (FBA) existe la firme decisión de lograr un consenso para que la preanalítica sea modificada también en nuestro país. "Entre nosotros vemos una resistencia lógica, dado que representa un cambio en un paradigma muy arraigado. Hace falta un consenso para que las sociedades científicas faciliten que las evidencias lleguen a todos sus miembros . Y también que la misma población acepte el cambio, porque habrá muchos pacientes que dudarán porque toda la vida guardaron 8 o 12 horas de ayuno. Pero esto, a excepción de algunos casos puntuales, ya no es necesario."