El autoempleo empieza a mostrar señales de fatiga
Durante la primera mitad de 2025, el trabajo por cuenta propia fue el principal motor de generación de empleo en Colombia y entre enero y mayo, más de medio millón de personas se sumaron al mercado laboral bajo esta modalidad
Durante la primera mitad de 2025, el trabajo por cuenta propia fue el principal motor de generación de empleo en Colombia y entre enero y mayo, más de medio millón de personas se sumaron al mercado laboral bajo esta modalidad. Sin embargo, las cifras más recientes del Dane muestran que ese impulso comenzó a diluirse con rapidez en el segundo semestre, marcando un cambio importante en la composición del empleo nacional. De acuerdo con el reporte de septiembre, el número de trabajadores por cuenta propia pasó de 9,69 millones a 9,73 millones, en el último año, con lo cual se mantiene la tendencia positiva del 2025. No obstante, el crecimiento mensual es cada vez menor si se dice que mientras en mayo se crearon 613.000 nuevos puestos de autoempleo frente al mismo mes del año anterior, en septiembre el aporte se redujo a solo 44.000. Este aumento fue de 444.000 en junio, luego bajó a 170.000 en julio, subió levemente a 202 en agosto y finalmente quedó en los poco más de 40.000 nuevos puestos de septiembre; el dato más bajo de lo que va corrido del año. Así las cosas, se podría hablar de un enfriamiento progresivo de este segmento, que hasta hace poco sostenía la ocupación. La presión de las altas tasas Portafolio habló con varios analistas al respecto, quienes coincidieron en que el fenómeno no significa una crisis laboral, sino una reconfiguración de las fuerzas del mercado. En primer lugar, la docente Claudia Flórez, de la Universidad de San Buenaventura, sostiene que tres factores explican el frenazo; comenzando por la menor tracción de la demanda, un crédito todavía caro y la saturación en sectores urbanos de baja productividad. A su juicio, la combinación de inflación moderada y tasas altas limita el flujo de caja de micronegocios que viven del día a día, resaltando que el Banco de la República mantiene su tasa en 9,25%. Así mismo, Flórez advierte que las cifras del Dane muestran una recomposición más que una contracción, dado que en septiembre, el empleo total aumentó en 714.000 personas frente al año anterior, pero la mayor parte del crecimiento provino de los asalariados del sector privado, que sumaron 473.000 nuevos ocupados. Esa lectura es compartida por Fabián Osorio, gerente de análisis sectorial de Corficolombiana, quien destaca que la generación de empleo formal ha mostrado un dinamismo notable, con el que, entre enero y septiembre, los ocupados formales aumentaron 3,9% frente al mismo periodo de 2024, superando en un punto porcentual el avance de los informales; lo que sugiere que el mercado laboral está entrando en una etapa de mayor calidad, aunque todavía con informalidad alta. Osorio agrega que parte del cambio responde a la reducción gradual de la jornada laboral, que bajará de 48 a 42 horas semanales entre 2023 y 2026 y que "esa medida ha llevado a que algunas empresas contraten más personal para compensar las horas perdidas. En el segmento formal, el número de ocupados creció 14%, mientras las horas trabajadas lo hicieron 7,7%. Entre los informales, las variaciones fueron mucho menores, lo que refuerza la brecha". Los datos del Dane también evidencian que la tasa de desempleo bajó a 8,2% en septiembre, mientras la informalidad nacional se redujo a 54,5%. No obstante, el mercado laboral sigue mostrando señales mixtas; por lo que Osorio advierte que parte de la disminución del desempleo se debe al aumento de la inactividad, especialmente en mujeres dedicadas al hogar y adultos mayores, dos grupos que abandonaron la búsqueda de empleo por razones económicas o personales. En esa misma línea, Juliana Morad, directora del Observatorio Laboral de la Universidad Javeriana, considera que el descenso del autoempleo tiene un componente estacional. "Además, la vigencia de la ley de garantías electorales tiende a frenar la contratación pública y por prestación de servicios, lo que reduce las oportunidades para los trabajadores independientes", acotó. A pesar de la pérdida de impulso, el autoempleo continúa siendo la base del mercado laboral y el promedio de trabajadores por cuenta propia entre enero y septiembre fue de 9,8 millones, frente a 9,3 millones un año atrás; dato que en términos porcentuales, representa un aumento del 5%, confirmando su papel como válvula de escape frente a la lenta creación de empleo asalariado.