Jueves, 13 de Noviembre de 2025

50 años de democracia en España

ColombiaEl Tiempo, Colombia 12 de noviembre de 2025


Después del asesinato del almirante y presidente de Gobierno de España, Luis Carrero Blanco, perpetrado en diciembre de 1973 por los terroristas de ETA en el barrio Salamanca de Madrid, se inició el deterioro del régimen del dictador Francisco Franco, que se agravó con su menguada salud hasta su fallecimiento en noviembre de 1975


Después del asesinato del almirante y presidente de Gobierno de España, Luis Carrero Blanco, perpetrado en diciembre de 1973 por los terroristas de ETA en el barrio Salamanca de Madrid, se inició el deterioro del régimen del dictador Francisco Franco, que se agravó con su menguada salud hasta su fallecimiento en noviembre de 1975. Con la muerte de Franco, se puso en marcha la Ley de Sucesión promovida por el generalísimo en 1947 y adoptada por las Cortes españolas en 1969. El legado del Caudillo incluía la instauración de la monarquía en cabeza del príncipe Juan Carlos de Borbón. Su proclamación en las Cortes tuvo lugar hace medio siglo, el 22 de noviembre de 1975. Se iniciaba así la Transición democrática de la dictadura franquista, en el poder desde 1936, a la monarquía parlamentaria. La Corona española celebra 50 años de vida democrática en el Palacio Real y en el Congreso de Diputados en Madrid, sin la presencia de Juan Carlos I, voluntariamente exiliado en Abu Dabi por su comportamiento personal, francamente indecoroso con España y ciertamente afrentoso con su familia. No obstante, es justo hacerle un reconocimiento a Juan Carlos I, quien en compañía de Adolfo Suárez, antiguo falangista, designado por el rey como presidente de Gobierno en 1976, fraguaron el desmonte de la dictadura franquista, la legalización de los partidos políticos, la convocatoria a elecciones generales y la promoción de la Transición democrática, que se tradujo en la aprobación de la Constitución de 1978, actualmente en vigor. Como dice Juan Carlos I en sus Memorias, redactadas con el apoyo de su biógrafa, historiadora y admiradora gala, Laurence Debray, publicadas en Francia, "es más fácil destruir la democracia que construirla". Y advierte que "nuestra monarquía es más reciente y más frágil (que otras monarquías europeas), pero igualmente preciosa ante los ataques frontales de ciertos partidos políticos". Juan Carlos I les recuerda a los españoles en sus Memorias que "la democracia no cayó del cielo" al evocar los peligros vividos en el Congreso de Diputados el 23 de febrero de 1981. Esa fría tarde de invierno madrileño, conocida como 23-F, el teniente coronel de la guardia civil, Antonio Tejero, irrumpió con su revolver en alto al hemiciclo parlamentario e hizo varios disparos al aire. Vimos en directo como los presentes se echaron al suelo, salvo el presidente Suárez, el general Gutiérrez Mellado, vicepresidente de Gobierno, y el comunista Santiago Carrillo. Haciendo gala de su temple de acero, Juan Carlos I enfrentó el golpe de Estado con firmeza y una alocución televisada de madrugada en la que manifestó que el rey era él, y les ordenó a los militares sublevados volver a los cuarteles. La historia recordará a Juan Carlos I como el monarca que cumplió su misión al salvaguardar la democracia española.
Andrés Espinosa Fenwarth
Miembro del Consejo Directivo del ICP. andresespinosa@inver10.co
La Nación Argentina O Globo Brasil El Mercurio Chile
El Tiempo Colombia La Nación Costa Rica La Prensa Gráfica El Salvador
El Universal México El Comercio Perú El Nuevo Dia Puerto Rico
Listin Diario República
Dominicana
El País Uruguay El Nacional Venezuela