La Nación, Costa Rica
19 de noviembre de 2025
Estos cantones experimentaron los crecimientos más importantes en competitividad entre 2021 y 2025
Tres cantones registraron mejoras significativas en competitividad durante los últimos cinco años, según el más reciente Índice de Competitividad Nacional (ICN), publicado por el Consejo de Promoción de la Competitividad (CPC).
Se trata de Río Cuarto, en Alajuela; Oreamuno, en Cartago; y San Isidro, en Heredia. Estos tres cantones registraron los mayores avances en competitividad entre 2021, cuando se publicó el primer informe, y 2025.
Río Cuarto pasó de una puntuación de 39,1 en 2021, con una valoración "deficiente", a 52,5 en 2025, con una calificación de "limitado". Esto representó un aumento de 13,4 puntos entre un informe y otro.
Este cantón es uno de los más nuevos de Costa Rica. En 2017 se convirtió en el número 82, tras la aprobación de la Asamblea Legislativa. Hasta entonces, la comunidad había pertenecido a Grecia.
José Miguel Jiménez, alcalde de Río Cuarto, afirmó que el ICN es una herramienta clave para la Municipalidad, ya que les ha permitido identificar y enfocarse en trabajar en los indicadores por mejorar.
"Trabajamos para que nuestro cantón sea visto por las empresas y todas las personas como un cantón ágil en sus trámites, digital y cero efectivo. Hay varios aspectos que hemos intentado mejorar", comentó Jiménez.
En el caso de Oreamuno, su puntuación general subió 10,7 unidades: en 2021 obtuvo una calificación "limitada" (50,9 puntos) y para este último informe alcanzó el nivel de "competente" (61,6 puntos).
San Isidro tuvo una mejora de 8,5 puntos, al pasar de una calificación como cantón "emergente", con 56,6 puntos, a "altamente competente", con 65,2 puntos para este 2025.
"Hay dos grandes factores comunes. El primero es el fortalecimiento del capital humano. En los tres cantones mejora de forma importante la dimensión de salud y el acceso a las tecnologías de la información dentro del sistema educativo, es decir, población más sana y escuelas con mejores herramientas digitales", afirmó Andrés Fernández, economista del CPC.
Fernández añadió que también influyó la mejora en infraestructura y servicios locales, en especial del Internet fijo y la capacidad de gestión de los gobiernos locales de cada uno de los cantones.
El economista del CPC enfatizó en que el progreso no se da en todas las dimensiones que se evalúan en el informe, es decir, no todas mejoran simultáneamente. Algunas suman y otras restan en el ponderado final.
El índice de competitividad publicado por el CPC desde 2021 evalúa seis grandes pilares: instituciones, infraestructura, adopción de tecnologías de información y comunicación, salud, habilidades y competencias, y dinamismo de mercados, a partir de 29 dimensiones y 125 indicadores a escala cantonal.
¿En qué mejoraron?
Las dimensiones que registraron mejoras más relevantes entre 2021 y 2025 en Río Cuarto fueron la exportación de bienes, la seguridad y los trámites ágiles, las cuales mostraron aumentos significativos en su puntuación.
Fernández señaló que también influyó una mejora importante en la salud. "Es un cantón pequeño, que está logrando combinar inserción productiva, mejor prestación de servicios básicos y un entorno percibido como más seguro", agregó.
Pese a estos avances, en términos generales el cantón se situó en la posición 57 de 82, lo que evidencia condiciones subóptimas en la mayoría de dimensiones que conforman el índice. Sin embargo, mejoró su lugar respecto a 2021, cuando estuvo en el sitio 75.
Entre las dimensiones que más descendieron en el cantón durante este periodo destacan las habilidades en ciencia y tecnología de la fuerza laboral, así como la infraestructura de la red vial cantonal y las redes de datos móviles.
Según el alcalde de Río Cuarto, el plan es seguir creciendo y revisar los indicadores en los cuales existen deficiencias. "Aún nos quedan muchos retos por enfrentar, el principal es el acceso a la institucionalidad", agregó.
En Oreamuno, el mayor crecimiento se observó en la dimensión del sector constructivo, seguido de las redes de datos fijos y los trámites ágiles. Sin embargo, hubo deterioros en la seguridad, las redes de datos móviles y el sector eléctrico.
El cantón cartaginés se situó en el lugar 13 de 82, lo que reflejó condiciones óptimas en la mayoría de dimensiones del ICN al ser calificado como "competente" en términos generales. Oreamuno escaló desde la posición 30, que ocupó en el listado de 2021.
En San Isidro, el desempeño mejoró principalmente en el sector constructivo, las redes de datos fijas y el acceso a tecnologías de información y comunicación, de acuerdo con el informe.
En este cantón herediano, las dimensiones de compromiso con la sostenibilidad y la de infraestructura de transporte registraron los descensos más marcados entre 2021 y 2025.
San Isidro se ubicó en la posición seis del índice general, por lo que obtuvo el distintivo de "altamente competente", lo que indica que cumple altos estándares en la mayoría de dimensiones que conforman el ICN. El cantón mejoró respecto al 2021, cuando estuvo en el lugar 23.
Fernández comentó que en estos dos cantones pesa, sobre todo, el sector constructivo, el cual explica buena parte del avance. Añadió que esto refleja una inversión en vivienda, comercio e infraestructura local.
Mejoras sostenidas
En el quinquenio 2021-2025, solo un tercio de los cantones mejoró de forma sostenida su competitividad, según el CPC. Además de los tres mencionados previamente, también avanzaron León Cortés, Puriscal, Tibás, Parrita, Sarchí, Coronado y Turrubares.
Los 10 cantones que más progresaron son responsables de más del 40% del crecimiento nacional acumulado. Sin embargo, durante este periodo los avances fueron limitados, ya que la nota nacional osciló entre 54 y 56 puntos, sin superar el umbral de 60, que podría considerarse un desempeño competitivo medio.
"El análisis de cinco años del ICN confirma que la competitividad nacional depende de pocos motores y enfrenta múltiples frenos estructurales", destacó el Consejo en este informe.
En tanto, los cantones con mayor pérdida de competitividad en el quinquenio —San José, Nicoya, Nandayure, Bagaces y Coto Brus— se han visto afectados por la inseguridad, el desempleo y el aumento del costo de vida, explicó el CPC.