Avances, vacíos y lo que viene para la acción climática
Aunque Belém dejó hitos en financiamiento, adaptación y género, la ausencia de un acuerdo sobre combustibles fósiles tensionó el cierre.
La COP30 terminó con señales mixtas. Si bien hubo avances inéditos en financiamiento, adaptación y mercados de carbono, la ausencia de un compromiso explícito para eliminar gradualmente los combustibles fósiles marcó la discusión final. Para Chile, que llegó con expectativas altas y unos NDC recién actualizados, el balance combina logros tangibles y desafíos estructurales que sostengan la acción climática en la región.
Para la ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, Belém permitió consolidar importantes herramientas, especialmente en mercados de carbono, financiamiento y medición de la adaptación. "En esta COP logramos avances clave para que los mercados internacionales de carbono sigan funcionando. El cierre del mercado del Protocolo de Kioto y la presentación de nuestra Hoja de Ruta refuerzan el liderazgo de Chile en la región y abren oportunidades concretas para movilizar inversiones sostenibles hacia 2035", afirma.
Chile participó activamente en la aprobación del Plan de Acción de Género, un marco de nueve años para integrar esta perspectiva en políticas y decisiones climáticas. La ministra Rojas colideró la negociación junto a Suecia, logrando uno de los acuerdos más destacados de la conferencia.
El plan reconoce que los impactos del cambio climático son diferenciados y que mujeres rurales, indígenas, migrantes o con discapacidad enfrentan vulnerabilidades específicas. También establece 27 actividades con entregables, responsables y plazos definidos, lo que lo convierte en uno de los instrumentos más operativos de la COP.
El desafío de lograr acciones concretas
"Este acuerdo nos permite avanzar hacia políticas más inclusivas, con datos, capacidades y financiamiento que respondan a nuestra realidad y a la de la región", agrega la ministra.
La COP30 también dejó avances relevantes en financiamiento, especialmente con el Paquete de Belém, que busca triplicar los recursos y reorganizar las inversiones, incluyendo fondos para pérdidas y daños. Otro aspecto positivo es la formación de un bloque de 80 países -incluido Chile- que impulsará una hoja de ruta para la reducción (" phase down ") y posterior eliminación (" phase out ") de combustibles fósiles, una iniciativa liderada por Brasil, según Danielly Mello, gerente de clima de Pacto Global.
"El desafío ahora es transformar los compromisos de esta COP en acciones concretas, con financiación adecuada y la colaboración de todos los actores para garantizar la justicia climática", señala.
Siguiendo con los desafíos, Chile debe traducir su NDC 2025-2035 y la Hoja de Ruta de Mercados de Carbono en acciones concretas. Esto requiere acelerar la implementación, mejorar la reportabilidad empresarial y dirigir inversiones a mitigación, adaptación y tecnologías como almacenamiento y captura de biogás, claves para cumplir con sus metas climáticas hacia 2030 y 2050, dice Catalina Cuevas, gerente de Servicios de Cambio Climático y Sostenibilidad de EY.
"La COP30 deja abierta la pregunta de si estamos ante el fin de la acción climática tal como la conocemos o si se trata del inicio de un nuevo multilateralismo verde", concluye.