Gobernanza híbrida
A pesar de todas las críticas que uno puede hacerle a la política de "paz total", considero que hay que valorar los avances que se han tenido en esa materia
A pesar de todas las críticas que uno puede hacerle a la política de "paz total", considero que hay que valorar los avances que se han tenido en esa materia. El proceso que más ha avanzado es, sin duda, la mesa de diálogos de paz entre la delegación del Gobierno, liderada por Armando Novoa, y la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano (Cneb), disidencia de la ‘Nueva Marquetalia’ de ‘Iván Márquez’, y cuyo jefe negociador es Walter Mendoza, exintegrante de las Farc-Ep. En efecto, uno de los más recientes avances ha sido el acuerdo de avanzar en la destrucción de más de 14 toneladas de material bélico, así como el de avanzar en la hoja de ruta para la puesta en marcha de las Zonas de Ubicación Temporal y Capacitación. Además de estos hechos concretos, quisiera resaltar algo que Novoa, jefe negociador del Gobierno, ha mencionado en varias entrevistas. Novoa ha hablado de la "gobernanza híbrida", concepto que algunos investigadores han denominado también "gobernanza criminal", "gobernanza armada ilegal", "rebelocracia", entre otros términos usados, para hacer referencia a la organización de civiles dentro de un territorio controlado por los rebeldes, o criminales. Existe un gran debate sobre si considerar ciertos grupos armados ilegales como rebeldes o como criminales, es decir, sobre si darles un carácter político o no. Considero que los que prefieren enfatizar el carácter criminal de estos grupos no están teniendo en cuenta lo que sucede en algunos territorios. La realidad, como afirma Novoa, es que estos grupos han creado una nueva forma de relacionarse con las comunidades, lo cual les facilita el reclutamiento, así como el control total de los lugares en los que están enraizados. Paradójicamente, el Acuerdo de Paz trajo muchos beneficios, pero también permitió que, de sus imperfecciones, los actores armados extrajeran varias lecciones. La antigua guerrilla de las Farc siempre enfatizó en sus documentos internos la importancia de mejorar la relación con la población civil. De ahí la famosa consigna de "quitarle el agua al pez" de la lucha contrainsurgente. Sin el apoyo de la población, la guerrilla no tendría posibilidad de expandirse. Claro, podríamos discutir sobre qué tipo de apoyo hablamos cuando hay alguien amenazándote con un fusil. Sin embargo, aquí está el error, asumir que todo grupo armado cuenta con el apoyo de la población a través de amenazas. Es cierto también que ahora hay un mayor flujo de dinero, lo cual les permite a los grupos armados pagarles no solo a los combatientes, sino también a sus familiares. Uno puede estar en contra de las economías ilícitas, pero la realidad es que, frente al incumplimiento del Estado en materia económica, y frente a la falta de oportunidades que viven los habitantes de esos territorios abandonados, los grupos armados ejercen un control, y este control tiene el apoyo de la población. De ahí que llamar esto de "gobernanza criminal" es tapar el sol con un dedo. Por esto, el conflicto armado jamás se resolverá "echando bala", como vociferan algunos candidatos presidenciales, ni demonizando a los actores armados. La consigna simplista de resolver el conflicto "a punta de bala", o de creer que todos los actores armados son simples "traquetos", es irreal; para lo único que sirve es para causar un efecto político coyuntural, pero no les resuelve la vida a los que están en medio del fuego cruzado ni mucho menos hace de Colombia un país más democrático. ¿Por qué creer que el Acuerdo de Paz de La Habana es una escritura sagrada? ¿Por qué no reconocer sus virtudes y, al mismo tiempo, reconocer sus límites? Algo parecido pasa con la Constitución del 91. ¿Por qué no reconocer que es el papel el que se tiene que adaptar a la realidad y no al revés?
El conflicto armado
Sara Tufano
A pesar de todas las críticas que uno puede hacerle a la política de "paz total", considero que hay que valorar los avances que se han tenido en esa materia.