En su reporte de despedida, Leonardo Suárez proyecta una gran alza del cobre y una mayor expansión en el primer año de Kast
"La aceleración de la demanda interna podría generar un equilibrio fiscal inesperado en 2026", comenta el economista.
El 2 de julio de 2003, Leonardo Suárez sorprendió al mercado con un informe cuyo resumen decía: "Mejora de la confianza de los inversionistas y mayor flujo de capitales asociado al rally del precio del cobre gatillaría la reactivación de Chile en 2004-2005". Fue a contracorriente entonces y anticipó el súbito incremento en el precio del metal y, efectivamente, los mejores años de crecimiento del gobierno de Ricardo Lagos.
El mismo Suárez ahora sostiene, en un informe fechado el 29 de diciembre de 2025: "En el actual escenario de precios más altos del cobre, la consiguiente apreciación cambiaria y señales más favorables para la inversión, el PIB no minero crecería 3,6% y el PIB minero se expandiría 1,0% en 2026. En conjunto, el crecimiento del PIB podría alcanzar 3,3%".
Tal como en 2003, el actual reporte no está hecho a medias tintas. Suárez prevé que el precio del cobre fluctuará entre US$ 5,3 y US$ 5,8 por libra el próximo año, cuando comience la administración de José Antonio Kast. "Nuestra proyección es que el alza del precio del cobre elevará los ingresos fiscales aportados por Codelco desde US$ 1.810 millones en 2025 a US$ 3.000 millones en 2026, y que la recaudación tributaria proveniente de la minería privada aumentará desde US$ 5.670 millones en 2025 a US$ 9.140 millones en 2026", calcula.
El equilibrio fiscal
Hay más. En su análisis, la dirección de Estudios de LarrainVial apunta que habrá una recuperación de la demanda interna; es decir, de la combinación entre inversión y consumo. El impulso permitiría más ingresos fiscales por impuestos no mineros y, considerando que solo se ejecute el alza del gasto público presupuestado (1,7%), "podría generar un equilibrio fiscal inesperado en 2026".
La deuda pública, en ese marco, caería hasta 40% del PIB en 2026, que se sustentaría en un mayor dinamismo económico, el balance de las cuentas fiscales y la apreciación del peso.
Y aquí vendría otra proyección de Suárez: "Un equilibrio fiscal inducido por la aceleración de la demanda interna otorgaría mayor espacio político a la administración Kast para reducir el impuesto corporativo".
Es un cóctel de bienvenida optimista para un primer año de cualquier gobierno. "A nuestro juicio, la administración Kast tiene una buena probabilidad de cumplir su promesa de reducir la burocracia y la tramitación excesiva", suma Suárez.
Hora de cierre
En un acápite del reporte de ayer, Suárez se despide. "Como siempre, me he esforzado por estar a la altura de los rigurosos estándares de profesionalismo y transparencia que han guiado mi trabajo en LarrainVial", indica.
El economista partió en la firma a inicios de 1996 y cierra su período mañana.
No se retira de la actividad, pues prestará asesorías en forma independiente. "Tal vez voy a asesorar inversionistas y cosas así. Voy a estar más libre, pero más vinculado al buy side . Eso significa hablar menos", cuenta a "El Mercurio".
El entorno para su propio ciclo será el de una economía en reactivación. El responsable, dice aquí, es el cobre y, en parte, las expectativas ante un gobierno promercado. "El alza del cobre va a mejorar las expectativas. Pero no va a ser inmediato: es desde el segundo semestre del próximo año que vamos a tener una economía muy bullante".