Tres alargues para clasificar a la final

Nunca antes una selección había tenido que jugar tres alargues para clasificar a la final de una copa del Mundo. Croacia impuso ayer esa marca. Ya había necesitado llegar a la tanda de penaltis frente a Dinamarca, en octavos de final, y frente a Rusia, en cuartos, y ayer, en la semifinal frente a Inglaterra, ganó con un gol de Mario Mandzukic en la prórroga. Tres equipos habían tenido dos alargues para llegar a la final del mundo. El primero fue Argentina, que eliminó por penaltis a Yugoslavia, en cuartos de final; e Italia, en semifinales, en el Mundial de Italia-90. Perdió con Alemania Occidental en la final. Hace cuatro años, Argentina también jugó dos alargues: venció 1-0 a Suiza en octavos de final y derrotó por penaltis a Holanda en semifinales. En la final, de nuevo con prórroga, perdió con Alemania. Francia también jugó dos alargues en 1998, pero uno de ellos se acabó antes de los 120 minutos: en octavos de final, frente a Paraguay, ganó 1-0, con gol de Laurent Blanc, a los 113. En ese entonces existía la regla del ‘gol de oro’: si había un tanto en la prórroga, se acababa el juego.