Ex canciller del Arzobispado de Santiago será formalizado por abusos sexuales reiterados

Hoy será formalizado el ex canciller del Arzobispado de Santiago Óscar Muñoz Toledo, por los delitos de abusos sexuales reiterados y un caso de violación en contra de siete víctimas, en el Tribunal de Garantía de Rancagua.

El sacerdote fue detenido ayer por el Departamento de Investigación Criminal de Carabineros (OS-9) en su casa, en Macul. Allí vivía desde que se autodenunció en la Oficina de Pastoral de Denuncias (Opade), el 2 de enero, y su caso fuera remitido a la Congregación para la Doctrina de la Fe.

Por otra parte, con la autorización del juez Luis Barría, del Juzgado de Garantía de Rancagua, el fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias, y personal del OS-9 de Carabineros realizaron un allanamiento en el Arzobispado de Santiago y en el Tribunal Eclesiástico.

Trascendió que se incautaron un computador, expedientes eclesiásticos, una tablet y un celular. En el domicilio de Muñoz Toledo se encontró otro expediente judicial.

Según el fiscal Arias, los "casos no están prescritos" y ocurrieron tanto en Rancagua como Santiago. Planteó que son siete víctimas, cuyas edades al momento de los supuestos ilícitos iban desde los 13 a los 17 años, y que algunas de ellas son parientes del mismo sacerdote.

Además de los delitos mencionados, el fiscal Arias indaga en la hipótesis de encubrimiento: "En general, les puedo decir que cualquier persona que quepa en la hipótesis de encubrimiento va a ser investigada penalmente (...) En cuanto a las personas en concreto, no me voy a referir".

Reacción del cardenal

Mientras las diligencias se efectuaban en la sede de la Iglesia de Santiago, el arzobispo Ricardo Ezzati manifestó que la situación de Muñoz Toledo "es un dolor muy grande por él, por su familia, por las víctimas. (Tengo) un pensamiento muy cercano y cordial a las víctimas que han sufrido de parte de él estos abusos. Finalmente (quiero expresar) el deseo de que la justicia tenga la última voz".

Momentos antes, en una declaración, el cardenal dijo que hubo incautaciones "de todas las piezas de investigaciones, tanto aquellas de carácter de denuncias, de investigaciones previas, así como aquellas que hubieran sido puestas a disposición de la Congregación para la Doctrina de la Fe a partir de 2007".

El padre de una de las víctimas sostuvo a "El Mercurio" que "como familia no vamos a hacer declaraciones todavía hasta mañana (hoy), después de la formalización en el tribunal de Rancagua, para saber efectivamente a qué nos enfrentamos".

Tampoco quiso confirmar si algún miembro de su familia había sido contactado por el fiscal. Pero anticipó que no asistirán a la formalización y que serán representados por la fiscalía.

El caso de Muñoz Toledo golpea particularmente a la Iglesia Católica, ya que en 2011 oficiaba como vicecanciller, y en ese rol, le correspondía tomar testimonio a las víctimas de abusos del sancionado sacerdote Fernando Karadima. Incluso declaró ante la ministra Jéssica González, quien investigó y acreditó los delitos del ex párroco de El Bosque, pero aplicó prescripción.

Esta es la segunda ocasión en que el fiscal Arias incauta documentación desde el Arzobispado de Santiago.

La primera vez fue el 13 de junio, cuando estaban en Chile los enviados papales, el arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y el oficial de la Congregación para la Doctrina de la Fe, monseñor Jordi Bertomeu.

Defensa

El Arzobispado de Santiago informó que su departamento jurídico no está a cargo de la defensa de Muñoz Toledo. Ex vicario de la Zona Oeste Galo Fernández: "(Muñoz) tiene que pagar la sentencia"Aunque hoy se desempeña como administrador apostólico en Talca, el obispo auxiliar de Santiago Galo Fernández fue vicario de la Zona Oeste.

Y fue precisamente en esa calidad en la que tuvo una directa participación al informar -en enero de este año- a los feligreses de la parroquia Jesús de Nazareth, en Estación Central, sobre la salida del presbítero Óscar Muñoz Toledo.

Ya en mayo, una vez que se conoció públicamente el caso, el prelado volvió a dirigirse a los feligreses de dicho templo: "Cuando en enero de este año el P. Óscar dejó la parroquia, solo les pude informar que el motivo era una situación de carácter personal familiar que él mismo había manifestado", reconoció el obispo en un comunicado.

A esa fecha, y una vez terminada la investigación eclesiástica en la arquidiócesis, el Arzobispado de Santiago difundió una declaración en la que indicaba que el presbítero de había autodenunciado por abusos.

Contactado ayer por "El Mercurio" por la situación judicial de Muñoz Toledo, monseñor Fernández señaló: "Un sacerdote es un chileno como cualquier otro y que está sujeto a la ley civil como corresponde. Lo que él ha cometido son delitos, por los cuales tiene que pagar la sentencia".

Al mencionarle que la Iglesia Católica no denunció al ex canciller ante el Ministerio Público, el prelado respondió: "La Iglesia incita y anima a quienes son víctimas a que hagan la denuncia como corresponde. La Iglesia no tiene conocimiento de los hechos que él ha cometido, sino que son las víctimas las que pueden hacer esa denuncia".