Sinopsis

El arte del cine, que devino en industria, es potente reflejo de la historia contemporánea y un reconstructor, que puede ser certero, del pasado. De este, en sus distintas expresiones adicionales a las posibilidades artísticas y de entretención, ha pasado a ser un auxiliar de variadas áreas del conocimiento, inclusive estimulando ejercicios proféticos tal cual en las sinopsis de próximo estreno con las que se activan las atracciones de posibles espectadores de película por estrenar. Este ejercicio vaticinador también se puede realizar trasladando el registro audiovisual de un hecho o suceso captado por las cámaras al diseño teórico de un venidero acontecimiento similar.
Ese pantallazo futurista se ha dado recientemente entre nosotros con las vistas de violencia callejera en comunas de la capital, producto de errores en la planificación de la entrega de subsidios de alimentos. Allí se evidenció la auténtica angustia del hambre, estimulada maliciosamente por consignas políticas anarquizantes, sumadas a acciones simplemente delincuenciales. Las grabaciones mostraron con crudeza un implacable presente, rememoraron un pretérito reciente y debieran inducir a pensar en un futuro inquietante que emergerá tan pronto se aquieten las virulencias.
No se trató de la sinopsis de un estreno, sino la de un reiterado reestreno de un filme que la mayoría no quisiera que vuelva a cartelera.