Los cetáceos pueden correr peligro tras fin del confinamiento europeo
En el Mediterráneo se ven delfines nadando cerca de las costas y grupos de cachalotes en zonas inusuales
En el Mediterráneo se ven delfines nadando cerca de las costas y grupos de cachalotes en zonas inusuales. El confinamiento decretado contra el coronavirus ha beneficiado a los cetáceos, pero la temporada turística podría arruinarlo todo.
A la asociación Souffleurs d'écume le preocupa que vuelvan algunos operadores que "acosan" a los animales con drones y después proponen a los turistas nadar con ellos. "Muchos olvidan que el Mediterráneo es también un hogar, donde los animales se alimentan, se reproducen, descansan", lamenta la asociación que forma a operadores turísticos para que apliquen métodos responsables para la observación de los animales marinos.
Además, durante los meses de confinamiento, el cese casi total del tráfico marítimo permitió a algunos cetáceos conquistar espacios generalmente muy frecuentados por las personas. Incluso los más viejos, de unos cien años, nunca habían vivido en esa tranquilidad.
Otra organización midió los ruidos submarinos y vio que durante el confinamiento disminuyeron en 30 decibeles en las zonas costeras del santuario marino Pelagos, en Mónaco, lo que le permitió a algunas especies interactuar más entre ellas.
Y según Quiet-Sea, en ese periodo, la tasa de hidrocarburos en el agua se redujo a la mitad.