Pantalla para la cultura
Emitido en los años 90 y conducido por el artista visual Nemesio Antúnez, "Ojo con el Arte" fue un programa ícono por haber llegado con la cultura a un público masivo. Por iniciativa del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, y la Fundación Nemesio Antúnez, se ideó la reedición de seis capítulos online , relevando distintas disciplinas artísticas con el sello que este carismático creador imprimió en televisión. Algunos de sus compañeros lo recuerdan.
Hoy se emite por segunda vez la reedición de "Ojo con el Arte", el emblemático programa que en los años 90 condujo Nemesio Antúnez y que se transmite el primer sábado del mes a través del canal de YouTube del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, en alianza con la Fundación Nemesio Antúnez. Una iniciativa que nació del éxito que tuvo una recreación realizada en el Día del Patrimonio en Casa, lo que llevó a generar seis capítulos inspirados en el esquema ideado por este multifacético artista visual, que fue director del Museo Nacional de Bellas Artes y murió en 1993.
Pero "Ojo con el Arte" tiene una historia más antigua. Todo había comenzado como un microprograma que emitía Canal 13 y que surgió de la mano de Claudio di Girolamo: "Nemesio, tú eres el director del museo, yo soy director del Canal 13, tenemos que inventar algo para llevar el arte a la gente en forma más masiva". Fue la propuesta que le hizo en 1969 a Nemesio Antúnez y, al poco tiempo, estaba hecho "dentro del noticiario de la noche, el flamante y mínimo programa, de apenas un par de minutos". Una oportunidad que aprovechó al máximo para explicar las exposiciones del museo e invitar a la gente a verlas.
"Al comienzo causó cierto estupor; nosotros mismos nos dimos cuenta de lo loco que parecía ver, en la pantalla, a un distinguido señor, sentado en una silla, al lado de una mesita llena de libros, delante de un par de bastidores que querían parecer una escenografía, abrir uno de esos libros y comentar la reproducción de un cuadro como 'Los Girasoles', de Van Gogh, mientras el lente de la cámara se acercaba, en zoom , a la imagen... y él hablaba de sus colores, y todo esto cuando la televisión aún era en blanco y negro", recuerda Claudio di Girolamo en su texto de 1996 El ojo de Nemesio . Estos primeros pasos del programa se interrumpieron con el golpe militar y el posterior autoexilio del artista en España.
Nemesio volvió a Chile en 1984 y retomó su cargo en el MNBA en 1990, el mismo año en que llegó la oferta que pondría a su programa nuevamente al aire. María de la Luz Savagnac, de Televisión Nacional, le había propuesto a Eduardo Tironi, gerente de programación y producción, hacer un programa que acercara el arte al público; de inmediato pensaron en él: "Le conté lo que quería hacer para entusiasmar a la gente con el arte y él lo encontró fantástico, porque quería hacer lo mismo con el museo", cuenta María de la Luz, quien dirigió "Ojo con el Arte" en sus tres temporadas, entre 1990 y 1992.
Así volvió a la televisión en colores, los sábados en la noche, con una duración de 50 minutos, como un espacio único al que todos querían ir. "Grabarlo en el taller en su casa se le ocurrió a él; la unidad móvil llegaba fácil, porque estaba muy cerca del canal, en Pedro de Valdivia Norte; se nos fue dando todo muy sencillo. Con el respeto que todos le tenían, a quien llamaba llegaba volando; iban felices, porque era el programa de Nemesio, y él era de una generosidad maravillosa", recuerda.
En el primer capítulo y frente a las cámaras, llamó a Roberto Matta por teléfono, a Italia, poniendo al aire una conversación entre amigos. Invitó a cineastas, arquitectos, pintores, diseñadores, folcloristas, actores de teatro, y a todo el que tenía algo que aportar al momento cultural y artístico que se estaba viviendo en ese tiempo. Viajó dentro y fuera de Chile, visitó a las bordadoras de Isla Negra, fue a los talleres de grandes artistas plásticos, también a los de alfareros, volantineros y tejedores: "El programa tenía olor a trementina", comenta María de la Luz.
"Allí todo era 'de verdad'... No había escenografía ni ambientación especial. Los cuadros apilados contra la pared y el caballete, con el último lienzo inconcluso esperando los toques definitivos y, sobre la mesa de trabajo, el choapino que se hiciera famoso a través del tiempo, atravesado por sus franjas multicolores como una carta de ajuste", escribe Di Girolamo, quien se incorporó al programa luego de la primera temporada, para hablar sobre temas de cine.
Junto con él llegaron Juan Pablo Izquierdo para comentar de música; Anita Reeves, de teatro, y Eduardo San Martín, de arquitectura. "Me llamaron para hablar sobre el proyecto elegido para el pabellón de Chile en Sevilla, y a propósito de eso me pidieron que me integrara. Cada vez que yo hablaba de un tema, Nemesio, que era arquitecto, sabía mucho más que yo, entonces en todos los programas él tenía una opinión. Era un tipo muy culto, con una capacidad enorme para llevar ese programa y hacer las preguntas incisivas, pero al alcance de la comprensión de los televidentes. Fue un gran motivador y llevó la cultura a los ciudadanos, de manera fácil y atractiva", afirma San Martín.
Pasó poco tiempo antes de que Nemesio enfermara y debiera dejar su taller, el programa y el museo. "Cuando murió, con todo el equipo decidimos no seguir con el programa. 'Ojo con el Arte' es Nemesio, yo lo veo así", dice María de la Luz.
Di Girolamo recuerda: "Su gesto, invitando a entrar desde la puerta del Museo de Bellas Artes, se volvió emblemático de todo el fenómeno cultural que significó 'Ojo con el Arte'. Entre el Museo y su público logró crear un circuito inédito hasta entonces, tomando como sus mejores aliadas a las pantallas de televisión".
Hoy, la versión online mantiene la puesta en escena original en su taller, frente a la misma mesa cubierta por el paño de colores y con bastidores de fondo. Las presentadoras son su hija Guillermina Antúnez y su nieta Olivia Guasch, directora ejecutiva y coordinadora de proyectos de la Fundación Nemesio Antúnez, respectivamente, junto con Erwin Brevis, secretario técnico del CMN, quienes en cada programa, con invitados especialistas, abordan temas como el arte muralista, la fotografía, el cine y la arquitectura.
Sin olvidar el concurso de dibujos infantiles que era una sección clave y que también se busca revivir. "Hemos tenido casos de adultos que han guardado los dibujos que hicieron para el programa de Nemesio y que nos han contactado para agradecer esta experiencia, porque quieren compartirla hoy con sus propios hijos. Eso nos demuestra lo valioso de revivir un programa tan maravilloso", dice la ministra Consuelo Valdés.