Cuerpo médico de Clínica las Condes contrata a César Barros en antesala de tratativas para cambios en modelo de negocios
Tiempos de cambios se avecinan en Clínica Las Condes (CLC)
Tiempos de cambios se avecinan en Clínica Las Condes (CLC). Es que hace cerca de un mes el cuerpo médico -representado por su comité ejecutivo- decidió contratar la asesoría de César Barros y del abogado Juan Enrique Allard, con miras a un proceso de cambio en el modelo de negocios que se avecina en la compañía médica hoy controlada por el grupo Auguri (Cecilia Karlezi).
Fuentes ligadas al comité ejecutivo del cuerpo médico de la clínica explican así la situación: CLC está en una nueva etapa, con nuevo controlador, lo que conlleva transformaciones que se van a requerir. "Está en juego el prestigio de la CLC. Ahora, en tiempos de pandemia, esto se hace más delicado y ha unido al cuerpo médico para construir en conjunto con la administración un nuevo acuerdo de trabajo que sea de mutuo beneficio. En este proceso esperamos trabajar con un espíritu de diálogo y altura de miras con la empresa", resumen estas fuentes.
El comité ejecutivo del cuerpo médico lo encabeza el doctor José Giordano, y representa a más de 500 médicos "férreamente unidos", dicen estas mismas fuentes, las que detallan el contexto en que se darán estas conversaciones: CLC tiene un sistema de funcionamiento con los médicos que obedecía a la tradición, pues la clínica fue fundada por médicos. Pero luego, a lo largo del tiempo entraron grupos de socios capitalistas -estuvo Piñera, Navarro-, y ahora el grupo Auguri. Ahora, con un nuevo directorio -en el cual también están representados los médicos-, se está proponiendo un cambio importante en la forma de funcionamiento de los médicos con la clínica. Dado eso, los médicos se dieron cuenta de que necesitaban un equipo asesor, tanto en la parte jurídica como en la económica.
¿Qué cambios vienen en el modelo? El contrato entre el cuerpo médico y CLC involucra aspectos como los sistemas de arrendamiento, cobros y pagos entre las partes, y se reconoce que CLC está atrasada respecto de los sistemas que usan otros complejos equivalentes y competidores, como la Clínica Alemana o la Santa María. "Hay que ponerlo al día. Se va a empezar una negociación al respecto, con miras a un contrato 'refundacional'", dicen estas fuentes, las que recalcan que esperan que estas tratativas se desarrollen "en un clima de respeto y diálogo, con altura de miras, disposición que es compartida por el directorio", enfatizan.
La llegada de la dupla Barros-Allard no fue a dedo, pues, con mucho sigilo, los médicos emprendieron un proceso de búsqueda de asesores, en el que participaron al menos cinco grupos de profesionales -incluido el grupo Tyndall, confidencian conocedores-, pero al final optaron por Barros-Allard, dada su experiencia en el manejo de complejos procesos de transformación de modelos de negocios. Se trata exactamente del mismo equipo que estuvo tras el complejísimo salvataje de la multitienda La Polar, tras el escándalo de las repactaciones unilaterales desatado en 2011. Y el mismo que estuvo tras el caso de la reestructuración de la caja La Araucana.
Comenzará una negociación entre la administración de la clínica y los médicos respecto de cómo opera la institución.