Fallece el fundador de Pitusa y National Lumber
Trabajador, reservado, de buen carácter, atento y nada arrogante
Trabajador, reservado, de buen carácter, atento y nada arrogante. Así describen a Israel Kopel, los que lo conocieron a lo largo de su fructífera carrera empresarial en Puerto Rico. El empresario falleció el Viernes Santo tras complicaciones de salud relacionadas con el corazón.
Durante más de cuatro décadas, Kopel desarrolló muchos negocios, pero tal vez el más reconocido de todos haya sido la cadena Pitusa. El primer Pitusa lo inauguró en el año 1977, justo antes de la temporada navideña.
En poco tiempo, Pitusa fue convirtiéndose en una de las cadenas preferidas del puertorriqueño, sobre todo de los consumidores de clase media y baja, ya que las tiendas contaban con un buen surtido de mercancía para el hogar, efectos escolares, productos de limpieza y de aseo personal, entre muchos otros, y a buen precio.
Consciente de ello, su fundador expandió la oferta, al punto que Pitusa se convirtió en una cadena por departamentos y hasta entró en el segmento de supermercados con los hipermercados Pitusa.
Llegó a tener una treintena de tiendas Pitusa y para el año 2002 generaba $250 millones aproximadamente, siendo uno de los empresarios más admirados en el sector detallista en la isla.
Pero Pitusa no fue el único negocio que creó. Fundó también las cadenas Todo a Peso y Algo Más, y Home Design. Esta última se especializaba en artículos de decoración para el hogar, sus seis locales tenían 20,000 pies cuadrados cada uno, pero a finales de 2001 decidió cerrarlos porque las ventas no crecían, y optó por usar esos espacios para añadir más tiendas Pitusa y Todo a Peso.
Kopel fue también desarrollador de urbanizaciones y de centros comerciales, en los que sus tiendas figuraban como anclas. Además, fundó las cadenas Bargain City y National Lumber. De la primera, tiene casi una veintena, mientras de las ferreterías ya superan el medio centenar las que están en operaciones.
De hecho, esta semana se supone abriría otra National Lumber, en la avenida 65 de Infantería, pero la apertura se pospuso hasta el próximo lunes debido al deceso del fundador de la cadena.
Hace una década Kopel se salió del negocio de supermercados y cerró las 16 Pitusa que operaban en ese momento.
Hablan otros empresarios
Empresarios entrevistados por El Nuevo Día lamentaron su partida y destacaron su calidad humana y las habilidades que tenía para manejar los negocios.
"Ha sido un golpe muy duro, la noticia me ha afectado. Israel era mi cliente más importante y fue amigo personal. Era como mi familia", expresó Eduardo La Rosa, suplidor de artículos de ferretería.
"Siempre fue muy atento con los suplidores, a todos los atendía. Era súper elegante en el trato, nada arrogante; humilde a pesar de ser millonario. Caballeros como él, quedan pocos. Nunca lo vi molesto o con mal carácter", sostuvo La Rosa, quien indicó que conversaba por teléfono con Kopel todos los días.
Gildo Massó, quien junto a su padre -del mismo nombre-, operó la cadena de ferreterías Massó, recordó cuando participaban en los shows de ferreteros en Chicago. "Coincidíamos en los shows en Chicago y Kopel compraba vagones y vagones. Era un negociante de verdad". Agregó que como empresario siempre fue "bien accessible" y dispuesto a conversar con sus competidores.
Por su parte, Jorge Pérez, de Ferreterías ACE Arilope en Aguadilla, dijo que admiraba la dedicación de Kopel al trabajo. "Era un hombre muy trabajador, con una capacidad inmensa, yo no creo que en Puerto Rico existan en este momento muchas personas con tanta capacidad para el trabajo como él".
"Yo lo conocí como competidor, era un caballero admirable por la cantidad de negocios y empleos que creó. Fue un hombre de negocios exitoso y un hombre de familia. Acompañamos a sus hijos en esta situación difícil", añadió Pérez.