Predicción, pronóstico, profecía
¿Qué pasará después de la pandemia?, pregúntase Drilo, amigo del discreto Critilo
¿Qué pasará después de la pandemia?, pregúntase Drilo, amigo del discreto Critilo.
Sin duda, hay predicciones. Afirmaciones basadas en guarismos, algoritmos y extrapolaciones. Los expertos anticipan sobre fundamentos empíricos y crean escenarios.
También hay pronósticos. Menos sólidos que las predicciones, contienen una dosis de incertidumbre calculada. El tiempo no se predice, se pronostica. También los comportamientos y los desarrollos humanos.
Hay, finalmente, profecías. Optimistas y agoreros por igual profetizan. Vaticinan. No precisan basarse en datos o en extrapolaciones. Basta con esperanzas. También, a veces, con deseos. Los profetas, a diferencia de los expertos, son sensibles instrumentos de las sociedades.
Que se cumplan predicciones, pronósticos y profecías dependerá de muchos factores. Primero, de la confianza, que es una virtud que apunta al futuro. Confianza en la ciencia, en las instituciones y en la estabilidad del mundo. También dependerá de la esquiva fortuna y de la insondable naturaleza. Pero no debe olvidarse que la felicidad futura no consistirá en tener lo que se quiere, sino en querer lo que se tiene.