Colegios particulares alertan fuerte impacto económico por ley de 40 horas laborales
Entre los recintos subvencionados hay división sobre cómo les influirá la nueva norma, pero algunos aseguran que significará un gasto operativo y en docentes.
La ley de 40 horas semanales, promulgada ayer por el Presidente Gabriel Boric, fue ampliamente celebrada por ministros de todas las carteras, incluyendo a Educación. Sin embargo, no todos en el sistema de enseñanza están contentos con ella.
La norma abarcará a aquellos trabajadores cuya jornada laboral se rija por el Código del Trabajo, por lo que, a nivel educacional, impacta directamente en establecimientos particulares privados. En ese tipo de recintos, tanto sus docentes, asistentes de la educación y trabajadores se rigen por ese formato laboral.
Esto implica, según advierten, que en muchos casos les significará pagar horas extras o contratar más docentes, en tiempos donde el déficit de 26 mil profesores, proyectado para 2025, ya se percibe a la hora de buscar nuevos profesionales para reemplazos.
El debate, además, está entre los colegios particulares subvencionados, que tienen distintas visiones sobre cómo les afecta la ley, y demuestra que existe desconocimiento sobre la legislación.
Hernán Saldaña, secretario de la Coordinadora de Colegios Particulares Subvencionados (CCPS), dice que "nos impacta fuertemente tanto desde el punto de vista operacional, pedagógico y económico", y que "desde el año pasado pusimos la alarma, nos reunimos con el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, y entre nuestros puntos estaban las 40 horas".
Alega que "el Gobierno le ha bajado el perfil a esto y también demuestra un grado importante de desconocimiento", y agrega que la CCPS encargó un estudio a Acción Educar que muestra que para suplir la necesidad de todos los colegios con el parámetro de las 40 horas habría que contratar a otros 19 mil docentes.
Distinta situación ocurre en colegios municipales y públicos, a cuyos trabajadores se les aplica el Estatuto Docente, con su propia jornada laboral, que en su artículo 80 indica expresamente que no aplica para establecimientos particulares pagados.
Sin embargo, el sector particular también tiene otra visión: el presidente de la Corporación Nacional de Colegios Particulares de Chile (Conacep), Hernán Herrera, plantea que "en lo que dice relación a los docentes y asistentes de la educación de los colegios particulares subvencionados, no les rige, porque en el tema del horario de 44 horas se rigen por el Estatuto Docente, al igual que al sector público".
En ese sentido, Herrera añade que faltan temas por resolver: "Entendemos que en el próximo tiempo van a tener que legislar, porque no van a dejar al sector público fuera, ni al menos a los docentes de los particulares subvencionados".
Mensualidades
Los apoderados también han planteado su preocupación por el tema, ya que en los próximos años los establecimientos podrían subir la colegiatura.
Érika Muñoz, presidenta de la Confederación de Padres y Apoderados de Colegios Particulares Subvencionados (Confepa), señala que "el tema de las 40 horas es bastante complejo, sobre todo para los asistentes de la educación, porque los contratos están por más de 40 horas, generalmente son de 44 horas, y ahora van a tener que bajarlos. ¿Quién cubre esas horas que faltan?".
Berta Droguett, apoderada del Colegio Manso de Velasco, de Melipilla, dice que "espero que el golpe económico no sea tan grande, porque igual sería triste ver buenos profesores irse, si ya hay varios que se acomplejan por los sueldos ahora".
Por su parte, José Luis Velasco, presidente de la Asociación de Educadores de Chile (Aseduch), opina que el acortar la jornada de los profesores "tiene muchos aspectos complejos y genera una serie de problemáticas".
La profesora María Teresa Romero, vocera de Escuelas Abiertas, señala que "implica mayor gasto para los establecimientos, ya que tendrán que contratar más docentes para cubrir las horas", y plantea que "para docentes con hijos menores a 12 años resulta difícil que no haya controversia para acordar con el empleador el asistir una hora más tarde a realizar clases, o retirarse una hora más temprano con el nuevo beneficio".