El Comercio, Perú
3 de enero de 2025
Mejoramiento. La medida tiene como objetivo reordenar el transporte público en Lima y Callao y fomentar la formalización del sector. Las compañías que opten por unidades que funcionen con GNV o electricidad tendrán permisos de circulación de hasta 15 años.
Por David HernándezPresidente ejecutivo de la ATU
La Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) oficializó, el pasado 28 de diciembre, el plan regulador de rutas, que permitirá reordenar el servicio de transporte público en la capital, formalizar a las empresas del sector, renovar la flota de buses y reducir la caótica congestión vehicular que agobia a los ciudadanos.
El documento establece que 364 empresas de transporte convencional operarán 462 rutas de Lima y Callao, con una flota de 22.000 unidades autorizadas. Cuando empiece la renovación de flota, se estima que se pasará a 17.000 unidades autorizadas porque se reemplazarán unidades de poca capacidad por otras que tengan una mayor.
Este régimen excepcional entrará en vigencia cuando se apruebe la actualización del Texto Único de Procedimientos Administrativos de la ATU, que está previsto que ocurra en los próximos días, luego del visto bueno del Ministerio de Economía y Finanzas.A las empresas cuyas autorizaciones previsionales están por vencer y que aún no reúnen las condiciones para acceder al régimen excepcional, se les está dando un plazo de dos meses de adecuación, hasta el 28 de febrero del 2025, para que puedan cumplir los requisitos que establece la norma, como tener buses con GPS, sistemas de pago sin contacto y conductores en planilla.
?Permiso de circulación?
El presidente ejecutivo de la ATU, David Hernández, explicó a El Comercio que el plan regulador busca que las empresas de transporte público se formalicen, tengan un manejo empresarial y accedan a créditos financieros, para que así puedan renovar su flota vehicular gracias a que cuentan con los títulos habilitantes que les permiten circular por las calles de la capital.
Detalló que las autorizaciones de circulación serán por 5, 10 y 15 años, pero dependerán del tipo de combustible que utilicen las unidades. Las empresas que opten por buses que funcionen con GNV tendrán autorización por 10 años, mientras que las que tengan unidades eléctricas la tendrán por 15 años. Las compañías con vehículos con diésel tendrán permiso por cinco años.
Hernández señaló que las rutas de transporte público ?son un tallarín?, por lo que el proceso de reordenamiento ha permitido pasar de 390 a 364 empresas que operarán bajo el nuevo planteamiento, y añadió que ?es un tema gradual?.
Asimismo, recalcó que solo se darán cinco años de autorización, no renovable y sin posibilidad de extenderla, a las empresas de transporte que operan donde hay concesiones como el Metropolitano, corredores complementarios y metro de Lima.
Dijo también que la aplicación del plan ha originado que varias empresas de transporte decidan fusionarse, y que de las 462 rutas, unas 21 se están eliminando, cuatro están creciendo y dos están postulando para ser trabajadas como rutas verdes al operar con buses eléctricos.
Por otro lado, Hernández destacó que con el reordenamiento se extenderá el recorrido de algunas empresas de transporte, a fin de atender a las zonas periféricas de Lima, así como conectar la capital con el Callao. Remarcó que las combis tendrán que ser reemplazadas por unidades de nueve metros, que vienen a ser las denominadas coasters. Sostuvo que los propietarios de las combis pueden acceder a créditos financieros al poner como garantía la ruta otorgada y así comprar unidades de mayor tamaño.
?Iniciativas tributarias?En una mesa técnica se vienen debatiendo varias iniciativas que pueden ayudar a los transportistas a renovar su flota, como la implementación de un régimen especial tributario y de IGV para el sector transporte. El presidente de la ATU explicó que los operadores de transporte público también pueden usar los bonos del Fondo de Inclusión Social Energético y de Cálidda, los cuales cubren hasta S/50.000, para aminorar el costo de un bus.
?Pueden entrar a un régimen especial que les permita usar el IGV, descontarlo como cualquier empresa lo hace como crédito fiscal?, puntualizó. ?Otro tema es el de la planilla, ya que significa un crecimiento del 33% en lo que es tu fuerza laboral, y la fuerza laboral es muy fuerte; por lo tanto, el impacto tributario también es alto?, agregó.
José Aguilar, expresidente de la ATU, respaldó la aplicación del plan regulador de rutas, ya que ?subrayó? las unidades de las empresas se superponen en diversas zonas de Lima, como en la avenida Abancay y en la Panamericana Norte, lo que genera congestión. ?Según los datos que se tienen, de aproximadamente 490 rutas, cerca del 60% se superponen en más de la mitad, entonces tenemos esta competencia entre las unidades?, aseveró.
No obstante, destacó que se aplique una gradualidad en la implementación del plan, pues opinó que no se puede retirar de un momento a otro a todas las combis y microbuses de las calles, ya que representan más de la mitad de las unidades que circulan en Lima.
Aguilar planteó que se cree un fondo para que las empresas de transporte más pequeñas puedan acceder a un financiamiento a través del chatarreo obligatorio de sus unidades más antiguas.
Incluso, propuso que organismos multilaterales o el propio Estado financien ese fondo para que los transportistas paguen tasas de interés más bajas.
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empresas de transporte público operarán en 462 rutas de Lima y Callao, según el plan de la ATU. Inicialmente habrá una flota de 22.000 unidades autorizadas.
