Sector. Cifra esconde la caída sostenida del PBI agroexportador durante 13 meses consecutivos. Anuncios de Trump sobre medidas arancelarias a principales socios comerciales trae consigo algunas oportunidades para nuestra agroexportación.
Por instituto peruano de economía (ipe)
El valor de las agroexportaciones peruanas anotó un récord de US$11.000 millones en el 2024. Sin embargo, por segundo año consecutivo, la expansión del valor de estos envíos está principalmente explicado por mayores precios internacionales, en lugar del rápido incremento del volumen exportado que caracterizó al sector durante las dos décadas previas. En este contexto, los anuncios del presidente Trump sobre medidas arancelarias a sus principales socios comerciales ?aunque, temporalmente suspendidos? implican algunas oportunidades para la agroexportación peruana, una de las actividades de mayor dinamismo económico y contribución al empleo formal.
?Balance 2024 ?
Las condiciones climáticas adversas fueron determinantes en la evolución de la agroexportación en los últimos dos años. El resultado fue una menor producción global de los principales cultivos de exportación y mayores precios de productos como palta, arándanos, cacao y café.
En particular, el precio internacional del cacao registró un alza histórica (+148%) y, junto con un mayor volumen de envíos (+38%), sus exportaciones se triplicaron, alcanzando un máximo de US$1.068 millones. Por su parte, los arándanos se consolidaron como el principal producto agroexportador del Perú, superando por primera vez a las uvas. Así, su valor exportado superó los US$2.200 millones, 40% más que en el 2023, gracias al aumento del volumen exportado (+57,6%)que compensó la caída del precio (-13,7%). En contraste, las exportaciones de uvas cayeron 3,6%, su primera contracción en siete años, ante la reducción del volumen exportado (-14%) que superó el incremento de los precios (+12%).
Estas dinámicas transformaron la estructura de las agroexportaciones peruanas. Por ejemplo, en el 2024, los arándanos representaron el 18% del valor total exportado, multiplicando por 18 su participación desde el 2014. En contraste, el café, que en el 2004 concentraba el 26% de las agroexportaciones, hoy representa solo el 9%. Así, los cinco principales productos de exportación del Perú, que concentraron el 60% del valor exportado en el 2024, representaban apenas el 30% hace 20 años.
?Oportunidades?
La imposición de aranceles de EE.UU. a México representa un riesgo alto para su capacidad exportadora: el 79% de las exportaciones mexicanas tuvieron como destino EE.UU. durante los últimos cinco años. Sin embargo, ello también representa una oportunidad de expansión para los productos peruanos. Por ejemplo, según datos del Haas Avocado Board, el 58% de los hogares en EE.UU. consume palta. Para entender mejor la magnitud de esta demanda, EE.UU. importa el 36% de toda la palta que el mundo exporta, y el 80% de estas importaciones provienen de México y solo 4% del Perú.
Aprovechar esta oportunidad no sería tarea sencilla. Por un lado, aunque el volumen de las exportaciones peruanas de palta se multiplicó 3,3 en la última década, alcanzando las 600.000 toneladas en el 2023 y reduciendo en un 43% la brecha con los envíos de México, las exportaciones de palta de este país aún duplican las del Perú. Por otro lado, las ventanas comerciales hoy son diferentes. Mientras que el 86% de las paltas peruanas se exportan entre abril y septiembre, las mexicanas se producen en todo el año, aunque con menor incidencia entre julio y agosto. Según Omar Díaz, gerente general de Westfalia Fruit, una de las principales empresas exportadoras de palta, los esfuerzos por extender la ventana exportadora en el Perú están asociados a promover nuevas variedades en la costa y a ampliar la superficie de cultivo en la sierra.
El auge de las agroexportaciones peruanas no deja de evidenciar los desafíos del sector. El crecimiento impulsado por el alza de precios esconde la caída sostenida del PBI agroexportador: 13 meses consecutivos de contracción del promedio móvil a 12 meses. Esto refleja la urgencia de fomentar una mayor inversión privada para expandir la producción, consolidar el crecimiento del agro a largo plazo y generar más empleo formal. La posible reconfiguración de la demanda en el mercado estadounidense ante la imposición de aranceles a México representa una oportunidad clara, por lo que fortalecer la competitividad del sector es fundamental.