Eleonora Badilla también asegura haber sido perseguida por el jerarca y UCCAEP, cámara que representa en la junta y que desde diciembre le solicitó su renuncia, asegura, que sin justificarle los motivos
Eleonora Badilla Saxe fue destituida por el Consejo de Gobierno como vicepresidenta de la Junta Directiva del Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) este 23 de abril, luego de semanas en las que ese órgano no sesionó.
Antes de la destitución, la catedrática dijo a este medio que vivió persecución por parte del presidente ejecutivo, pues considera que suspendieron las sesiones por su presencia y de Uccaep, organización que representaba y que dice le solicitó la renuncia sin dar razones.
Recientemente, Badilla pidió a la auditoría de la institución que realizara una investigación para determinar si el presidente ejecutivo del Instituto, Christian Rucavado Leandro, estaría incumpliendo sus deberes al no garantizar sesiones de la junta al menos una vez a la semana. La última sesión se realizó el 17 de marzo.
Para Rucavado la solicitud de Badilla "carece de fundamentos claros".
Badilla, quien fue representante de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep) en la junta, considera que el órgano dejó de sesionar porque ella no había sido destituída y afirma que convocaban y desconvocaban sesiones.
Por su parte, el jerarca del INA señaló que la sesión del 24 de marzo no se realizó porque los equipos de transmisión y grabación se dañaron, no se alcanzó el quórum requerido para una sesión híbrida y que las semanas siguientes mientras se reparaban los dispositivos, no se logró tener el quórum presencial.
Badilla afirmó que desde diciembre Uccaep le solicitó la renuncia sin darle justificación. Posteriormente, la cámara solicitó al Consejo de Gobierno que la destituyeran.
El director ejecutivo de Uccaep, Jorge Luis Araya, dijo a La Nación que el caso se fundamenta "por el retiro de Badilla de varias sesiones de la Junta Directiva sin previa comunicación".
"Persecución"
Badilla comentó que luego de la última sesión de la junta, realizada el 17 de marzo, hizo dos consultas que considera no agradaron a los integrantes de la junta y que desde entonces inició "una persecución": la primera fue consultar en qué estado estaba la mesa de trabajo del INA con la Escuela de Lenguas Modernas de la Universidad de Costa Rica (UCR).
Y la segunda fue sobre la consulta nacional que dice realiza el INA acerca de esas personas que quieren estudiar inglés.