Hay quienes apuestan a ganador y al menos dos fuerzas políticas dicen conformarse con un "crecimiento" general en todo el territorio; también hay desilusiones con el desempeño en las encuiestas de algunos postulantes, mientras los candidatos preparan actos finales o se centran en recorridas.
Los objetivos políticos del
Frente Amplio y de los partidos de la
Coalición Republicana para las elecciones departamentales del próximo domingo no pueden ser más variados. Las metas y las expectativas cambian según las tiendas políticas, en particular entre los dos grandes bloques que pujan por continuar o recuperar espacios de poder en todo el país, y también entre los propios candidatos a las 19 intendencias y 136 municipios y listas que los apoyan.
No tiene el fragor de la última campaña electoral que terminó en un disputado balotaje entre el actual presidente frenteamplista
Yamandú Orsi y el derrotado
Álvaro Delgado, fundamentalmente en Montevideo y Canelones donde la victoria de la coalición de izquierda está prácticamente asegurada, aunque en muchos otros departamentos la competencia es reñida y la ansiedad por el resultado en los dirigentes políticos de todos los colores es alta.
Con este escenario, los postulantes ya están o planificando o realizando sus cierres de campaña como siempre ocurre, al borde de la veda electoral que comenzará mañana viernes, que incluye, según el caso, caravanas, actos finales o recorridas.
En Montevideo, por ejemplo, la izquierda cerrará esta carrera por el sillón municipal con un acto grande este jueves en el intercambiador Belloni con sus tres candidatos el favorito
Mario Bergara,
Lucía Piñeiro y
Salvador Schelotto mientras que en la Coalición Republicana sus candidatos no planifican concentraciones grandes. El nacionalista
Martín Lema despegado en intención de votos en esta interna de esta alianza, en tanto, dedicó este miércoles a la visita de los ocho municipios de la capital y unos 17 puntos de concentración de militantes bajo la consigna de que "los escritorios de los jerarcas" tienen que estar "en la calle", como señalaron desde su equipo de comunicación.
Expectativas por "crecimiento" e intercambio de departamentos
Aunque en un principio en el Partido Nacional había cifradas esperanzas en que Lema podía desplazar al FA del gobierno de Montevideo, en las últimas semanas los blancos comenzaron a asumir que la izquierda llegará a 40 años al frente de la IMM, pese al "cansancio" que los blancos dicen haber encontrado entre los capitalinos con la gestión de la izquierda.
Pero no hay resoplidos largos en el comando de Lema, porque la apuesta del extitular del Mides es superar la votación de la elección pasada cuando el FA ganó por 10 puntos a los partidos de la coalición que entonces compitieron con Laura Raffo y llegar a un apoyo en votos inédito en este siglo, lo que a su juicio permitirá asentar la plataforma electoral con la que volverán a buscar el objetivo dentro de cinco años.
En Canelones el escenario también es de una derrota más que probable, pero los nacionalistas buscan de todos modos votar todo lo posible "ganar" su propia interna los candidatos blancos son
Sebastián Andújar y
Alfonso Lereté y la de la Coalición, lema en donde también compite el colorado
Walter Cervini.
En el resto del país, la expectativa del Partido Nacional es retener las 15 intendencias que tienen actualmente , y en este sentido sus esfuerzos están concentrados en Rocha donde el FA amenaza con volver a gobernar y en que, si pierden Río Negro lo que dan por hecho en el FA, se alcance la meta en Salto y el saldo no se modifique. En otros sitios, como en Artigas, donde el proyecto de la exdiputada
Valentina Dos Santos condenada por el escándalo de las horas extra parece que se impondrá sin mayores dificultades con la candidatura de
Emiliano Soravilla, los nacionalistas saben que el partido está ganado.
Los objetivos de los colorados son menos ambiciosos, reconocieron a El País fuentes de la conducción de este partido. Saben que seguirán solamente con su bastión de Rivera, pero se enfocan en que el partido tenga un "crecimiento general" en todo el país. Eso es algo confían en lograr, lo que tiene entusiasmada a su dirigencia, pese a la "desilusión" de varios de sus referentes por el bajo desempeño que asumen tendrá
Virginia Cáceres en Montevideo los sondeos proyectan una votación de 5% para la candidata coloada, de quien esperaban mayor impacto.
El Frente Amplio, como ya informó El País, tiene identificado
un grupo de ocho intendencias "ganables", y dentro de ellos algunos son vistos como más alcance de la mano, como
Paysandú,
Rocha y
Salto.Pero más allá de eso, dijo este miércoles el presidente de los frenteamplistas,
Fernando Pereira, la fuerza política tiene el convencimiento de que su campaña pese a la diferencia de recursos con los blancos
(ver recuadro) va a permitirle a la izquierda "crecer en todo el país", lo que ya "en sí mismo sería un gran avance".