El dirigente Alex Saul encabeza las negociaciones con el representante del futbolista; la intención es que extienda su vínculo actual por al menos dos temporadas.
Nacional pisó el acelerador y abrió con antelación la primera puerta para conversar sobre el contrato profesional de Exequiel Mereles, quien vence su vínculo el 31 de diciembre de 2026.
Alex Saul, actual segundo vicepresidente y en su momento integrante de la Comisión de Contrataciones durante la gestión de Ricardo Alarcón, fue quien tomó la posta de las gestiones y estuvo en contacto esta semana con Pablo Bentancur, su representante, según pudo saber Ovación.
¿Qué se está negociando ahora? La posibilidad de extender el contrato por dos temporadas más, que incluya una mejora salarial para el jugador, cuya ficha pertenece en un 60% al club y en un 40% al empresario.
La situación va por "buen camino", confían las dos partes. El optimismo en Nacional es total, según dio a entender el propio Saúl: "Lo vamos a arreglar", expresó, convencido.
Un punto a favor de los tricolores es que Mereles tiene intenciones de quedarse, por lo que tendrán prioridad al momento de negociar un acuerdo.
La otra pata de este asunto radica en los interesados, ya que hay un equipo de la Primera División del fútbol argentino que se comunicó con su entorno, con intenciones de contratarlo. Ya en el verano Bentancur había advertido con la posibilidad de llevárselo al Bellizona de Suiza, algo con lo que Flavio Perchman no coincidió.
A diferencia de otras instancias, el vicepresidente se hizo a un lado esta vez, ya que no tiene "feeling" con el representante. Le delegó el caso a Saul, quien ya había intervenido como interlocutor el pasado diciembre en las renovaciones de Gonzalo Carneiro, Christian Oliva y Diego Polenta.
El ida y vuelta entre el dirigente y el empresario no es de ahora. Ambos tuvieron en ese momento una charla de 40 minutos e intercambiaron una serie de mensajes previo a ponerse de acuerdo.
Bentancur, de algún modo, se salió con la suya porque desde un primer momento le planteó al entonces presidente Alejandro Balbi que quería hacer las tres renovaciones en conjunto.
Los nuevos dirigentes, conformes con el rendimiento de los tres jugadores, decidieron ceder y continuaron por la misma veía, aunque también pusieron sus argumentos sobre la mesa.
En los primeros días del año, ni Oliva ni Polenta entrenaron a la par del resto del grupo, aunque sí se presentaron en Los Céspedes. Se limitaron a trotar y se mantuvieron aislados a un costado de la cancha hasta que la extensión llegó a buen puerto. Carneiro, por obvias razones (rotura de ligamentos cruzados), recién la semana pasada trabajó en las mismas condiciones que sus compañeros.
A Mereles, Pablo Peirano lo quiere utilizar y por parte de Nacional no se piensa incluirlo en ninguna negociación. La inquietud por renovarlo es algo en lo que coinciden los dos protagonistas de esta historia. "Quiero que lo renueven", dijo Bentancur a este medio hace algunas semanas. "Es el último jugador que nos queda", expresó, por su lado, Perchman.