Mensaje de Powell desata la euforia en Wall Street
Wall Street recibió este viernes con los brazos abiertos y subidas en torno al 3% el esperado discurso del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, en el simposio de Jackson Hole, donde apuntó a que en septiembre el organismo que dirige podría optar por recortar los tipos de interés por primera vez en nueve meses
Wall Street recibió este viernes con los brazos abiertos y subidas en torno al 3% el esperado discurso del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, en el simposio de Jackson Hole, donde apuntó a que en septiembre el organismo que dirige podría optar por recortar los tipos de interés por primera vez en nueve meses. Powell, afirmó este viernes que "la balanza de riesgos" para la economía de su país "está cambiando", lo que junto a su preocupación por el mercado laboral, podría llevar a que el organismo implemente pronto una rebaja de tipos de interés. "Las perspectivas y el equilibrio cambiante de riesgos (de la economía) pueden justificar un ajuste de nuestra postura y de nuestra política (monetaria)", dijo Powell durante su intervención en el simposio de banqueros centrales que preside en la localidad de Jackson Hole (Wyoming). "Los riesgos para la inflación están sesgados al alza y los riesgos para el empleo, a la baja, una situación compleja cuando nuestros objetivos están tan en conflicto", explicó Powell en referencia al doble mandato de la Fed, y añadió que pese a que el precio del dinero se encuentra ahora "más cerca de la neutralidad que hace un año" las actuales "perspectivas de referencia y el cambiante en la balanza de riesgos podrían justificar un ajuste de nuestra postura política". El presidente de la Fed dijo que el mercado laboral muestra una "curiosa" estabilidad "que resulta de una caída de la oferta y la demanda de trabajadores" pero los riesgos a la baja están subiendo. También consideró, por primera vez con tanta claridad, que el efecto del aumento arancelario en los precios podría ser "relativamente corto", aunque "los efectos de los aranceles en los precios al consumo ya son claramente visibles".