Toto Núñez: Matosas como padre, DT, psicólogo y revulsivo de Danubio, y la "final" del domingo ante Peñarol

"No te vas a ir, yo te quiero en mi equipo". Esa fue la orden de Gustavo Matosas para Sergio Núñez (25), cuando el delantero estuvo cerca de dejar Danubio por no tener garantías sobre si Juan Manuel Olivera lo iba a tener en cuenta en su plantel. En ese momento la Franja estaba en un mal momento, sufriendo una racha de 18 partidos sin victorias. Situación que pasó a ser anécdota. "Hoy es diferente porque Gustavo es un tipo ganador y sabe cómo revertir situaciones", asegura Toto Núñez ante la consulta sobre qué cambio respecto a aquel equipo.

"Nos aconseja mucho, trabaja demasiado en el grupo, nos motiva y por eso el equipo ha cambiado. Desde que agarró se siente: jugamos mejor y el grupo se siente mucho mejor, porque hasta el que no juega o no está citado, está contento. Le dio un revulsivo al equipo", añade sobre el interino al que no quieren dejar ir. El mismo que en agosto dejó su puesto de director deportivo para suplantar a Olivera, que "trabajaba bien", según el "9" franjeado. "Pero en el fútbol los que mandan son los resultados", matiza.

En palabras de Núñez, Matosas es padre, psicólogo, nutricionista y entrenador del equipo. "Está hasta en el detalle más chico. Por ejemplo, si uno erra un gol en la práctica te hace hacer veinte lagartijas o te manda a caminar por el complejo. Si tirás un centro mal, vas a tirar dos centros, tres, cuatro, hasta que salga bien. Así con todo", ejemplifica. Pero no solo en cancha, también les pide escribir cosas en un cuaderno o "pegar frases en sus casas". Toto pone de ejemplo una que parece haberlo marcado: "Lo que haces hoy ¿te aleja o te acerca de tus metas?".

Los objetivos de la Franja mutaron en el año y esos 19 partidos pasaron factura, así que todas sus energías están puestas en un único norte: meterse en las copas internacionales de 2026. Hoy en día está a cinco puntos del octavo en la Anual, que es Cerro Largo, a falta de seis fechas, las próximas dos son las más complicadas. Peñarol este domingo y con Nacional el siguiente.

"El triunfo con Montevideo City Torque nos dio más confianza y seguridad, veníamos trabajando bien, creo que el partido con Defensor lo perdimos por detalles. Pero ahora no podemos perder puntos con ninguno de los dos", analiza el sanducero, para el que el próximo juego tendrá otro gusto, ya que será ante el club que lo formó.

"No hagas de vuelta como en Cerro Largo"

"Lo vivo distinto. Tengo amigos que me dicen 'no te hagas el vivo con Peñarol el domingo. Cuidate, no hagas de vuelta como en Cerro Largo' (marcó el 1-0 parcial a los 5 minutos por el Clausura 2024). Lo tomo diferente porque le tengo mucho cariño a Peñarol, me crié en el club", confiesa Núñez, y añade: "Es un partido que no es para demostrar, sino para disfrutarlo. También va a ser especial para Gustavo o Hernán que se hicieron en Peñarol". Y con este último se refiere a Novick, que tras colgar los botines se unió al cuerpo técnico. Y por qué no para Camilo Mayada, en su primer cruce desde su salida del mirasol.

"Con Hernán tenemos una linda relación, porque era nuestro compañero y ahora ayudante. Eso no quita que haya alguna broma". Las chicanas también con los extricolores, Papelito Fernández, Colo Ramírez, Perg y Velázquez no se quedan atrás. "Alguna broma hay, pero siempre con respeto", comenta Sergio, y destaca la actitud de sus compañeros: "Somos un grupo muy unido. En su momento, cuando no ganábamos, nunca hubo una pelea ni discusión grave. Nos bancamos muchas cosas en ese momento y no queremos volver a sentarnos en esa silla, queremos ganar".

Núñez define el juego en el Campeón del Siglo (18:00) como "una final" en la que no pueden perder puntos, y vuelve a elogiar al DT: "El plantel está absorbiendo todo lo que nos pueda dar Gustavo, porque al ser interino en cualquier momento se puede ir".

A préstamo desde Liverpool hasta fin de año, Sergio viene jugando de extremo y suma cuatro goles y la misma cantidad de asistencias en 31 encuentros con la Franja. Sus festejos suelen tener guiños a los personajes ánime y la razón forma parte de un recuerdo. "Nace porque con mi hermano los mirábamos juntos cuando éramos chicos. Lo empecé a hacer en Cerro Largo y me gustó. Es como mi nostalgia de la infancia", explica.

Del equipo de Maroñas le sorprendió el grupo, uno en el que los referentes aconsejan sin celos y tienen a líderes sin fecha de caducidad como Papelito. "Más allá de que es goleador y tiene 40 años, lo que admiro es su humildad. Y que cuando erro un gol siempre está para decir 'dale que la próxima sale' y si lo hago, se pone contento".

Y con esa confesión Toto define al club, al Danubio de Matosas, el "tipo ganador".