Reforma a la salud afectaría sistema de riesgos laborales
Aunque el trámite de la reforma a la salud parece destinado al hundimiento de este proyecto, entre múltiples dilaciones, la discusión que se ha dado hasta el momento frente a este tema, ha girado alrededor del modelo de atención, la gestión de las EPS y la operación de los nuevos Centros de Atención Primaria, sin embargo, para algunos expertos, el debate no puede quedarse únicamente en la estructura asistencial
Aunque el trámite de la reforma a la salud parece destinado al hundimiento de este proyecto, entre múltiples dilaciones, la discusión que se ha dado hasta el momento frente a este tema, ha girado alrededor del modelo de atención, la gestión de las EPS y la operación de los nuevos Centros de Atención Primaria, sin embargo, para algunos expertos, el debate no puede quedarse únicamente en la estructura asistencial. En charla con Portafolio, Belisario Velázquez Pinilla, presidente de Belisario SAS, aseguró que los cambios que propone el Gobierno también tendrían efectos indirectos en el mercado laboral, especialmente en el manejo de incapacidades y en la financiación del sistema de riesgos. En primer lugar, este abogado señala que los asuntos estrictamente relacionados con accidentes o enfermedades laborales no generan mayor preocupación porque continuarán bajo la administración de las ARL y durante la entrevista recordó que "si el trabajador tiene una complicación de salud, pero tiene que ver directamente con un factor de riesgo, con un peligro o alguna cosa así, pues no hay ningún problema porque estaríamos protegidos con los recursos de la administradora de riesgos laborales". En ese escenario, sostiene que las empresas no tendrían cambios sustanciales en sus obligaciones ni en su operación. Sin embargo, el verdadero foco de tensión surge en el manejo de los eventos de salud que no están asociados al trabajo; particularmente en los casos denominados como riesgo común, es decir, accidentes domésticos, lesiones fuera del horario laboral o enfermedades de origen cotidiano, pueden ocasionar largas incapacidades y, por ende, ausentismo significativo dentro de las organizaciones. En ese mismo sentido, alerta sobre un riesgo adicional que, de concretarse, tendría impactos severos en las empresas y en el mercado laboral, por medio de la posibilidad de que se utilicen los recursos de promoción y prevención de las ARL para financiar los CAP; punto en el que fue enfático frente a que aquello sería una mala noticia, pues "eso es un atentado contra el único sistema que está funcionando más o menos bien", al considerar que riesgos laborales opera al 80% mientras que salud común está "por debajo del 50%". Así las cosas, su preocupación radica en que, si se desfinancia riesgos laborales, las empresas podrían enfrentar mayores cargas y una reducción en la capacidad de respuesta ante emergencias.