India saca buena nota en innovadoras clases sobre felicidad en los colegios
Lecciones sobre mindfulness , expresión de las emociones y cómo lidiar con el fracaso son parte del plan de estudios. Otros países, como Nepal y Emiratos Árabes Unidos, ya preparan iniciativas similares.
"¿Qué me hace feliz?" y "¿cómo puedo ser un instrumento en la felicidad de otras personas?".
Estas son preguntas con las que puede empezar una clase en el estado indio de Delhi (capital del país) gracias a su iniciativa "Happy curriculum".
Se trata de un programa educativo para niños que va desde la educación parvularia hasta el octavo grado y que se basa en enseñanzas sobre la felicidad. Creado por el Gobierno de Delhi en 2018, el sistema se ha ido instalando en las escuelas de ese territorio desde entonces.
Según sus estatutos, el objetivo es "mejorar el bienestar mental y enseñar atención plena (también conocida como mindfulness ), aprendizaje socioemocional, pensamiento crítico, resolución de problemas y construcción de relaciones, para que tengan una personalidad segura y agradable".
El plan de estudios emplea técnicas como enseñanza de historias reflexivas, expresión de las emociones y actividades interactivas sobre temas como lidiar con el fracaso y mejorar las relaciones interpersonales. Y a pesar de su formalidad, estas clases no tienen un sistema de calificaciones.
Según cifras de la Asamblea Legislativa de Delhi, el programa ya se ejecuta en más de mil escuelas, donde 1,6 millones de alumnos practican la atención plena todos los días.
"Las directrices del currículum de la felicidad son concordantes con los hallazgos de dos líneas de investigación. Por un lado, el área de las neurociencias sugiere que el bienestar emocional intra e interpersonal es esencial para promover aprendizajes profundos", comenta Ernesto Treviño, doctor en Educación por la Universidad de Harvard e investigador de la Facultad de Educación de la UC.
Desarrollo infantil
"En segundo lugar, los lineamientos del 'Happy curriculum' son coincidentes con las propuestas sobre habilidades del siglo XXI. Por lo tanto, se trata de una propuesta curricular interesante en sintonía con las necesidades de desarrollo infantil de la actualidad", añade.
De acuerdo con el gobierno de Delhi, el plan de estudios de la felicidad se diseñó utilizando aportes de un equipo de 40 profesionales que incluyó profesores, psicólogos, consultores educativos, voluntarios, altos funcionarios de la Dirección de Educación del Gobierno de Delhi, trabajadores de ONG y el Consejo Estatal de Investigación y Capacitación Educativa.
El concepto de "pensamiento coexistente" del filósofo Agrahar Nagraj Sarman es una gran parte del programa, junto con las filosofías de Mahatma Gandhi y Rabindranath Tagore.
Inspirándose en ese plan de estudios, recientemente los estados indios de Andhra Pradesh y Uttarakhand, así como Afganistán, Nepal y Emiratos Árabes Unidos anunciaron que se están preparando para crear programas similares.
"Creo que después de la pandemia han quedado en evidencia más problemas de salud mental y las dificultades que tenemos al vincularnos con otros y la necesidad de que el sistema educativo vaya incorporando este tema", opina Pamela Araya, directora de la carrera de Psicopedagogía de la UNAB.
Estas son temáticas que están estrechamente ligadas con el aprendizaje para la vida y que preparan a las nuevas generaciones para enfrentar el futuro, plantean los entrevistados.
"Estamos dentro de una sociedad en la que debemos aportar desde nuestras disciplinas con distintos puntos de vista y para eso debo saber trabajar de forma colaborativa con el resto y tener herramientas socioemocionales. Son habilidades propias de hoy", dice Araya.
Enfrentar el futuro
Coincide Geraldine Jara, académica de la Facultad de Educación de la U. San Sebastián. "El cómo los estudiantes se conectan con el presente tiene relación con el proceso de aprendizaje, algo que se está trabajando hace tiempo según el concepto de las inteligencias múltiples, donde se ha visto que si la persona aprende a estar más presente, algo que se enseña con el mindfulness, aprende mejor".
Recientemente, la organización india sin fines de lucro Dream a Dream y el centro de investigación Brookings Institution realizaron un estudio sobre el impacto del programa.
Entre los hallazgos está una mejor relación entre alumnos y profesores, mayor participación en el aula y mayor concentración en múltiples asignaturas.