La seguridad, la migración y el comercio, ejes de Trump 2.0
Las relaciones entre Colombia y EE
Las relaciones entre Colombia y EE. UU. vuelven al centro del debate con la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. María Claudia Lacouture, presidenta de AmCham Colombia, dice que en la primera administración Colombia mantuvo una relación estable y respetuosa, con una cooperación sólida. Sin embargo, los retos que plantea un nuevo período presidencial exigen estrategias para abordar temas clave como migración, seguridad, narcotráfico y comercio. ¿Qué efectos económicos hay? Más allá de las relaciones políticas, el comercio sigue dinámicas propias. Si bien la política puede influir en la economía, no anula su lógica interna. Colombia tiene la oportunidad de aprovechar la reconfiguración global que traerá un nuevo mandato de Trump. Las cifras de su primera administración lo respaldan. A pesar de la tensión comercial y la política de ‘América Primero’, las importaciones desde Colombia crecieron un 3% entre 2018 y 2019. Luego, la pandemia generó una contracción del 24%, pero en 2021 el comercio repuntó un 22%, según el U.S. Census Bureau. Dado que los flujos comerciales de Colombia representan una fracción menor en el comercio total de EE.UU., el riesgo de que Trump implemente represalias directas contra el país es limitado. ¿Cuáles son los riesgos? Este liderazgo será mas contundente en buscar resultados en las principales prioridades domésticas de Trump, como reducir la inmigración no autorizada, frenar el contrabando de fentanilo y otras drogas ilícitas, y disminuir la entrada de bienes chinos a EE. UU., que dependen en gran medida de A. Latina. Si bien Colombia no es un actor prioritario en la agenda de Trump, sigue siendo un país clave en seguridad, migración y comercio. El aumento de cultivos ilícitos y el tránsito migratorio en el Darién podrían generar mayor presión desde EE.UU. para fortalecer los controles fronterizos y la cooperación antidrogas. A su vez, la creciente inversión china en infraestructura y comercio podría generar preocupación en Washington, derivando en un mayor escrutinio sobre acuerdos estratégicos. ¿Es posible una disrupción con Petro? Es innegable que habrá diferencias, pero no significa que sus gobiernos no puedan alcanzar acuerdos en temas clave. Más allá de las relaciones políticas, el comercio mantiene dinámicas propias que, aunque pueden verse influenciadas por la coyuntura, no pierden su inercia. Ambos mandatarios comparten interés en asuntos como migración, narcotráfico y seguridad; sus enfoques difieren significativamente. ¿ Y el efecto de La Franja y La Ruta? El presidente Trump ha insistido en la protección de la industria estadounidense, promoviendo aranceles altos para fortalecer la competitividad nacional y resguardar los intereses de seguridad, entre otras. Cada medida está directamente relacionada con China, cuyo crecimiento económico y presencia en A. Latina han aumentado significativamente desde la salida de Trump de la presidencia. El anuncio de Colombia sobre su interés en firmar La Franja y La Ruta va en contravía de estas posturas y estrategias de Estados Unidos. Esto podría generar preocupación en Washington, aumentando el escrutinio sobre acuerdos estratégicos y el impacto de la creciente inversión china en infraestructura y comercio en el país. ¿Cuál es el potencial actual de Colombia con Estados Unidos? El abastecimiento de bienes intermedios adquirirá mayor preponderancia y en ese proceso Colombia debe y tiene la oportunidad de seguir aumentando presencia. Desde la Cámara nos hemos adelantado para ver cómo Colombia puede sacar el mayor provecho de esta tendencia. Realizamos un estudio donde encontramos 144 ventajas comparativas reveladas en partidas frente a China, 43 frente a Canadá y 37 frente a México. Se trata de productos diversificados y con valor agregado que ayudarán a seguir fortaleciendo la innovación de nuestra cadena productiva. Agroindustria, manufacturas de múltiples sectores, minerales, y textiles diferenciados se destacan entre las mayores oportunidades. Si a eso le sumamos el potencial de crecimiento de hasta un 250% del sector agroindustrial a 2027, Colombia tiene todas las opciones para lograr maximizar sus flujos comerciales hacia EE. UU..