Todo se sabe
Vale la pena estar pendiente de las estupendas exposiciones de la Biblioteca Nacional de Colombia: la nueva, titulada ‘Todo se sabe: el cuento de la creación de Gabo’, es un recorrido por los manuscritos de los cuentos, las novelas, los artículos, las cartas, las fotografías, los dibujos, los vestidos y las máquinas de escribir del narrador que sigue definiendo nuestra cultura -la publicación de la novela póstuma En agosto nos vemos, el éxito de la serie de Netflix basada en Cien años de soledad y las citas garciamarquianas en los discursos del Presidente de la República prueban su relevancia- once años después de su muerte
Vale la pena estar pendiente de las estupendas exposiciones de la Biblioteca Nacional de Colombia: la nueva, titulada ‘Todo se sabe: el cuento de la creación de Gabo’, es un recorrido por los manuscritos de los cuentos, las novelas, los artículos, las cartas, las fotografías, los dibujos, los vestidos y las máquinas de escribir del narrador que sigue definiendo nuestra cultura -la publicación de la novela póstuma En agosto nos vemos, el éxito de la serie de Netflix basada en Cien años de soledad y las citas garciamarquianas en los discursos del Presidente de la República prueban su relevancia- once años después de su muerte. El bello montaje de ‘Todo se sabe’ , una suma de paneles de madera y de urnas que consiguen llevar al visitante al mundo del autor, ha sido posible gracias a los archivos de la Fundación Gabo, el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, el Harry Ransom Center de la Universidad de Texas, la familia García Barcha y el Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes. La Biblioteca Nacional, dirigida por la excelente Adriana Martínez-Villaba, sigue consiguiendo -así lo hizo con la exposición de la vida de la poeta María Mercedes Carranza- recrear intimidades de creadores que no dejan de iluminar la experiencia en este mundo. El sociólogo Álvaro Santa Acuña, curador principal de la exposición, autor de un libro a punto de ser traducido sobre la escritura de Cien años de soledad, habla de siete rincones en el recorrido: los siete lugares, ‘Orígenes’, ‘Una novela llamada Colombia’, ‘Hacia el mundo’, ‘Escribir la soledad’, ‘La carpintería de Gabo’, ‘Un escritor comprometido’ y ‘El escritor global’, nos llevan por la tras escena de una mente creativa como pocas, pero también nos responden la pregunta de qué tuvo que pasar -qué país, qué lecturas, qué talentos- para que se diera una obra capaz de trascender su época. Vale la pena verlo con los propios ojos. editorial@eltiempo.com