Nacional le dio paliza al América con goleada 4-1

Pablo Romero - Redactor de el tiempo@PabloRomeroET
Hubo fiesta en el Atanasio Girardot. Fiesta a cargo de Atlético Nacional, que le dio un baile al América de Cali, lo paseó y lo goleó 4-1 en el partido de ida de la semifinal de la Copa Colombia. El verde fue demoledor y encaminó el paso a la final. La vuelta será el 13 de noviembre, en el Pascual. El partido arrancó como se esperaba, como si fuera una final, ida y vuelta, Nacional presuroso por imponer condiciones, América deseoso de no dejarse someter. Esos primeros minutos fueron de alta intensidad. Nadie se quería equivocar. América, de vez en cuando, lanzaba sus ataques feroces para demostrar que no iba a defenderse. Barrios y Roa tuvieron remates sin puntería que intimidaron a la defensa. Al minuto 35 el Atanasio fue un volcán sacudido por el movimiento de esa masiva afición cuando Nacional activó la presión, Uribe robó, atracó a la defensa, se llevó la pelota y se la dio a Bauzá, que hizo una pared con Morelos y luego sacó un derechazo a un ángulo, Soto se lanzó a ver qué podía hacer, pero nada, la pelota fue adentro, 1-0. Ese ya era otro partido. América tenía que decidir, o se agrupaba para evitar el segundo o buscaba la hazaña. La ida al descanso fue un alivio escarlata. No para descansar, claro, sino para poner la cabeza en orden, a ver qué hacían en la segunda parte. Pero el descanso no sirvió. En el segundo tiempo, Nacional pulverizó la resistencia escarlata. Matheus anotó el segundo, luego de que Morelos le cediera la pelota con un pase atrás. 2-0 en 50 minutos. Nacional no estaba saciado. América no había terminado de sufrir. Rengifo cobró un tiro de esquina letal, al primer palo, con efecto hacia adentro y con ruta hacia el arco. Cuando el portero Soto reaccionó tuvo que ir a sacar la pelota casi desde adentro de su cabaña. ¿Gol olímpico? Eso pareció en la transmisión. Morelos quedó picado y en la siguiente acción sacó uno de sus remates favoritos, fuerte, abajo, y adentro, 4-0. Yojan Garcés Papula puso el 4-1 para disimular la humillación del América.