El Comercio, Perú
9 de noviembre de 2025
El fenómeno dejó al menos seis muertos y 750 heridos en el estado sureño de Paraná.
Las autoridades del estado brasileño de Paraná declararon ayer la condición de calamidad pública en los municipios castigados el pasado viernes por un tornado sin precedentes que dejó al menos seis muertos, 750 heridos y una ciudad con el 90% de sus construcciones en ruinas.
El fenómeno meteorológico, con vientos de hasta 250 km/h, tormentas y granizo, dejó sin vivienda a unas 10.000 personas en 14 municipios del sur de Brasil, fronterizo con Argentina.
Las ciudades más afectadas fueron Río Bonito do Iguaçu, donde se reportaron cinco víctimas mortales, y Guarapuava, con una. Los equipos de rescate aún buscan a una persona desaparecida y a posibles víctimas bajo los escombros de decenas de viviendas.
El gobierno de Paraná, que instaló un hospital de campaña en Río Bonito do Iguaçu, informó que diez de los heridos se encuentran en estado grave y fueron trasladados a centros con mayor capacidad.
En Río Bonito do Iguaçu, ciudad de unos 13.500 habitantes, el tornado destruyó cerca del 90% de sus viviendas y construcciones, y causó la muerte de tres hombres, una mujer y una adolescente.
El gobernador de Paraná, Ratinho Junior, declaró la calamidad pública para movilizar recursos y anunció que, una vez concluidas las labores de búsqueda y rescate, comenzará la reconstrucción de viviendas.
El dirigente político, que visitó la región afectada, también decretó tres días de luto oficial en memoria de las víctimas.
