La caída del pelo tras la menopausia es muy común, pero pocas mujeres lo saben
Médicos advierten que pacientes normalizan la pérdida de cabello como "algo inevitable" o que está asociado a la edad. Pero en muchos casos se relaciona con los cambios hormonales y se puede tratar.
A medida que el cuerpo entra en la menopausia -habitualmente entre los 44 y los 55 años-, algunos cambios físicos y emocionales se hacen muy notorios y muchas mujeres lo asocian de inmediato a esta etapa.
Pero otros síntomas, que también afectan la calidad de vida, no siempre se vinculan al climaterio. Entre ellos está la caída del pelo, un signo más común de lo que se piensa.
Un estudio publicado en la revista Menopause y destacado hace pocos días por la revista TIME reveló que el 52% de las mujeres entre 50 y 65 años experimenta pérdida capilar tras la menopausia. Según el trabajo, estos cambios pueden manifestarse como un ensanchamiento de la raya del cabello, una línea de nacimiento más alta o cada vez más mechones en el cepillo o la ducha.
En Chile, médicos especialistas confirman que la caída del pelo es algo que se ve frecuentemente en consulta. Sin embargo, advierten que aun así muchas mujeres no consultan o postergan la atención porque tienden a normalizar la situación, viéndola como un "cambio inevitable" o asociado a la edad.
"Muchas mujeres, cuando uno les pregunta, refieren que se les ha caído el pelo, pero no saben que puede deberse a las alteraciones hormonales que se producen en la menopausia", señala María de los Ángeles Larraín, ginecóloga del Programa de Climaterio de la Clínica Universidad de los Andes.
Algo muy similar observa Pilar Valenzuela, ginecóloga especialista en climaterio, académica UC y creadora del pódcast "Menopausia para todas". Valenzuela, de hecho, dedicó un capítulo completo a este tema debido al desconocimiento que se percibe entre las pacientes.
Feminidad e identidad
"El pelo es un símbolo de feminidad y forma parte de la identidad de cada uno", dice Valenzuela. "Y es un gran tema durante la menopausia porque sí sucede que muchas mujeres presentan distintos cambios en esta etapa que las afectan".
Ignacio de la Torre, ginecólogo de Clínica Ciudad del Mar, agrega que "muchas veces la caída ocurre de forma gradual, lo que hace que las pacientes no se den cuenta a tiempo y retrasen el diagnóstico".
Los médicos coinciden en que estos cambios se explican principalmente por la caída de los niveles de estrógeno y progesterona. "Al caer estas hormonas, los andrógenos pasan a tener una mayor relevancia. Como resultado, hay como un adelgazamiento del pelo, se vuelve más fino y hay una pérdida de densidad", precisa Valenzuela.
Bernardita Blümel, ginecóloga de Clínica Santa María, explica que, al bajar los estrógenos, "el cabello pasa más rápido a una fase de caída, lo que produce su desprendimiento de forma difusa (general en toda la cabeza) y no en parches".
Valenzuela agrega que este proceso puede acelerarse en mujeres que presentan una condición de base llamada alopecia androgénica femenina, una afección hereditaria caracterizada por una sensibilidad particular a los andrógenos. "En la mujer que la presenta y que, por ende, ya tenía poco pelo, se ve aumentada esta condición", señala.
De acuerdo con la especialista, otros cambios frecuentes que pueden aparecer en cualquier mujer durante la menopausia incluyen que "el pelo lo empezamos a notar más seco, más frágil y con menos brillo".
La buena noticia es que existe tratamiento. Los expertos coinciden en que el primer paso es consultar oportunamente, porque la caída capilar sí puede mejorar cuando se aborda a tiempo (ver recuadro).
Además, concuerdan los médicos, se deben descartar otras causas -como problemas a la tiroides o deficiencia de alguna vitamina- y evaluar el estado del folículo.
Blümel explica que la terapia hormonal para menopausia con estrógeno puede mejorar la calidad del pelo y su caída al corregir el déficit hormonal. "No siempre revierte la alopecia, pero sí ayuda a frenar la caída", precisa la ginecóloga.
Larraín coincide. Sin embargo, plantea que este tratamiento no siempre es suficiente. En algunos casos, señala, se debe complementar con terapias orientadas a fortalecer el folículo piloso y que son indicadas por un dermatólogo.
La suplementación con vitaminas, en cambio, solo tiene efecto cuando existe un déficit real, apunta Valenzuela.
El mensaje final de los especialistas es claro: no ignorar los cambios. "Muchos síntomas de la menopausia pueden ser revertidos con un tratamiento adecuado. Las pacientes pueden beneficiarse de distintos tipos de terapia de reemplazo hormonal, según cuáles sean sus síntomas predominantes y en la etapa en la que están", puntualiza De la Torre.
Consultar a tiempoLos especialistas advierten que postergar la consulta disminuye las posibilidades de recuperación. En condiciones como la alopecia androgénica femenina, los folículos se van haciendo cada vez más pequeños y, una vez que se pierden, "no hay vuelta atrás porque el folículo muere", asevera Valenzuela. Y si bien la terapia hormonal puede ayudar, los médicos insisten en que el manejo es individual y que un examen temprano permite definir mejor el tratamiento para cada mujer.