Jueves, 05 de Junio de 2025

La voz del CEO

ColombiaEl Tiempo, Colombia 3 de junio de 2025

Nicole Klahr
Cada vez que se publican rankings sobre los CEO más visibles o influyentes, me surge una pregunta fundamental: ¿entendemos lo que significa que un líder empresarial tenga voz pública? Porque estar en redes no es lo mismo que comunicar

Nicole Klahr
Cada vez que se publican rankings sobre los CEO más visibles o influyentes, me surge una pregunta fundamental: ¿entendemos lo que significa que un líder empresarial tenga voz pública? Porque estar en redes no es lo mismo que comunicar. Y mucho menos, que liderar desde la palabra. Hoy muchos CEO entran al juego de LinkedIn o de las entrevistas en medios por exposición. Pero eso no es liderazgo. Un CEO no debería hablar por obligación, ni por el impulso del equipo de comunicaciones. Debería hacerlo porque entiende el valor de su palabra. Porque sabe que su voz puede ser una guía, una fuente de inspiración, un reflejo del poder ejercido con propósito. La reputación de una empresa no es un activo intangible. Es una construcción viva, ligada a la percepción del liderazgo. El Reputation Institute es claro: el liderazgo visible y auténtico es uno de los pilares que más inciden en la confianza hacia las compañías. Merco, al evaluar la reputación empresarial, mide la coherencia entre lo que el líder representa y lo que la empresa proyecta. No es casualidad que los CEO con mejor reputación sean aquellos que logran conectar con la opinión pública más allá del discurso. No buscamos propaganda en perfiles de CEO. Buscamos humanidad. Queremos saber cómo piensa, qué le importa, qué le preocupa. Qué aprendió en momentos difíciles. Cómo toma decisiones. Qué significa liderar personas. Esa es la verdadera gestión de reputación. No llenar el ‘feed’ con eventos, cifras y fotos de equipo, sino mostrarse de verdad. Porque un CEO que solo habla como si leyera el manual de marca pierde relevancia. Es ruido de fondo. Nos está pasando. Se han corporativizado los canales personales. Lo que antes podía ser un espacio para conocer al ser humano detrás del cargo, se ha vuelto una extensión pulida, predecible de la empresa. Cuando todo suena igual, nada conecta. No basta con ser un buen gestor. Hoy se espera que los líderes hablen. Que expliquen, conecten, tengan opinión. No es activismo, ni marketing emocional. Es carácter. Mostrar integridad cuando nadie te obliga. De entender que la reputación no se delega. Ejemplo de liderazgo con voz propia es Larry Fink, CEO de BlackRock. A través de sus cartas anuales, ha defendido la inversión responsable y el papel social de las empresas, aún si genera controversia. Su liderazgo generó debate, y marcó agenda. Porque un CEO visible no es el que más postea. Es el que más inspira y defiende sus creencias y estilo. En tiempos de sobreinformación, es un valor que ninguna compañía no puede desaprovechar.
Socia y directora estratégica IDDEA Comunicaciones.
La Nación Argentina O Globo Brasil El Mercurio Chile
El Tiempo Colombia La Nación Costa Rica La Prensa Gráfica El Salvador
El Universal México El Comercio Perú El Nuevo Dia Puerto Rico
Listin Diario República
Dominicana
El País Uruguay El Nacional Venezuela